El festival Contempopránea, referente de los certámenes veraniegos del indie pop español, podría dejar de celebrarse en la población pacense de Alburquerque tras quince años ininterrumpidos por los problemas de infraestructura con los que suelen encontrarse. Esta medida o el cambio de formato a un festival más pequeño son dos alternativas que el director del certamen, Agustín Fuentes, se plantea tras los problemas que cada año se encuentran los cerca de 4.000 espectadores llegados desde todos los puntos de España, al encontrar ocupadas las escasas plazas hoteleras.

Según Fuentes, los visitantes se ven obligados a alojarse, unos en la zona de acampada gratuita, y muchos otros en casas particulares de vecinos del pueblo, en régimen de alquiler, un alquiler que a veces alcanza precios desorbitados. "Nos vemos en la obligación moral de cerrar un ciclo y abrir otro y barajamos varias opciones, entre ellas, un festival en Alburquerque con un formato distinto para menos espectadores y adaptado a lo que el pueblo puede asumir", ha señalado Fuentes. La organización del festival reconoce que los servicios que a veces se pagan por las casas alquiladas son, además de caros, deficientes, por lo que las quejas y escritos de protesta se han incrementado tras la celebración de este año, entre el 22 y 24 de julio pasados.