El cineasta checo Milos Forman, autor de Amadeus , vuelve al cine tras siete años de ausencia con Los fantasmas de Goya , una crónica de la España del siglo XVIII protagonizada por Javier Bardem y Natalie Portman, que le produce "mucho miedo" ante la posibilidad de "decepcionar al pueblo español".

Forman, ganador de dos Oscar de Hollywood, reconoce que, a sus 74 años, "nunca había trabajado con gente tan agradable, dispuesta y entusiasta" como la que ha encontrado en el rodaje de su película número 15, Los fantasmas de Goya , que se estrena el 10 de noviembre, y en la que recurre de nuevo a un personaje real, el pintor aragonés Francisco de Goya, para reflejar en sus circunstancias vitales un mensaje universal, y en este caso muestra "dos visiones muy distintas de la vida: la pragmática de Goya y la de un gran creyente como el Hermano Lorenzo", explica a Efe en una entrevista telefónica desde su casa en Nueva York.

De esta manera, da mayor protagonismo al personaje que interpreta Javier Bardem, Lorenzo, en sus intentos de "cambiar el mundo pero de manera desacertada; primero como inquisidor y más tarde como ministro de Bonaparte", comenta.

El papel del actor español encuentra su nexo con el pintor de Saturno devorando a un hijo , interpretado por el sueco Stelan Skarsgard, en una joven de buena familia que sirve de musa para el pintor y es arrestada y sometida a todo tipo de vejaciones por parte de la Inquisición, interpretada por Natalie Portman.

Forman visitó el Museo de El Prado de Madrid en los años ochenta y comenzó a indagar sobre aquella persona "capaz de plasmar dos mundos tan diferentes como el existente en un retrato de la familia real y el de las Pinturas Negras", explica.

Por ello, investigó su compleja personalidad y descubrió cómo, en 1792 --año el que arranca la trama de la película-- "solo quería que lo dejaran en paz y nunca tuvo ningún tipo de implicación política, a pesar de trabajar para la corte", indica.

Rodada en inglés eligió a actores que lo hablasen como Blanca Portillo, Unax Ugalde o José Luis Gómez, mientras que Javier Aguirresarobe se encargó de la fotografía y de la documentación el guionista Jean Claude Carriere, con quien trabajó en Valmont . Además de con Carriere, Forman se reencontró con su productor, Saul Saentz, y eso, sumado al "ambiente encantador" del rodaje, le hizo sentirse "entre amigos" y calificar Los fantasmas de Goya como "la mejor experiencia profesional" de su carrera.