La Fundación Norman Foster abrirá sus puertas en España, en un palacete madrileño, el 1 de junio tras varios años de negociaciones. Para su estreno han organizado, además, un foro en el que participarán, entre otros, Michael Bloomberg, Nicholas Negroponte y Jonathan Ive.

Joaquín Saldaña construyó en 1902, en la calle de Montesquinza, el palacete que Norman Foster (Manchester, 1953) compró en 2013 y que ha reformado pero cuyas obras atravesaron por momentos de incertidumbre en 2014 derivados de los «inconvenientes» para autorizar la habilitación de una superficie que está protegida y que abarca 1.704 metros.

El objetivo de la fundación es constituirse como una plataforma global de debates e investigación para nuevas generaciones de arquitectos, diseñadores y urbanistas, y albergar el archivo personal de Foster, formado por más de 74.000 maquetas, planos, dibujos, películas, y su librería.

El palacete, que en la década de los años treinta y entrados los cuarenta fue la sede de la Embajada turca y más tarde de un banco, ha revivido su antiguo esplendor porque el británico ha conectado el pasado con su futuro.

La recepción de la fundación está presidida por la enorme maqueta, en forma de avión, del trabajo que hizo Foster para el aeropuerto de Pekín. El área más recoleta de la Norman Foster Foundation es lo que se denomina el pabellón, una estructura cristalina y aérea en la que se expondrán obras de su colección de arte tales como esculturas de Boccioni o una réplica del coche Voisin, de Le Corbusier.

En ese espacio reina la escultura que le ha encargado a la artista española Cristina Iglesias (San Sebastián, 1956), que se ha inspirado en un relato de Arthur C. Clarke para su diseño y que recuerda al caparazón de un armadillo.

La fundación arracancará con la celebración en el Teatro Real del foro Future is now, en el que participarán, entre otros, el exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg, o el diseñador jefe de Apple, Jonathan Ive.