John Cusack, casi olvidada ya su etapa juvenil en películas adolescentes, atesora una carrera cinematográfica pródiga en títulos interesantes como Los timadores , Alta fidelidad y Cómo ser John Malkovitch . Grace is gone , película del debutante James C. Strouse presentada en competición oficial en el festival Sundance, augura un punto de inflexión en la filmografía del actor.

En ella interpreta a un padre de familia conservador y rígido, firme partidario de la intervención en Irak y de la administración Bush, cuya esposa se encuentra sirviendo en el frente iraquí mientras él se hace cargo del hogar familiar. Cuando recibe la noticia de la muerte de su esposa, incapaz de asumirlo y comunicárselo a sus hijas, se las lleva de excursión a un parque temático de Florida. Pero esta huida de la realidad termina convirtiéndose en un viaje de aprendizaje para las niñas que, desconcertadas, empiezan a vislumbrar facetas de la personalidad de su padre hasta entonces desconocidas.

La película ha tenido una gran acogida en Sundance, donde todas las apuestas la sitúan como favorita a alguno de los premios importantes del certamen. Grace is gone es una de las primeras aproximaciones desde la ficción a un conflicto vivo y sin visos de solución inmediata que está agotando la paciencia de los estadounidenses. El filme está planteado como una respuesta a la política de Bush de no permitir imágenes de cadáveres o ataúdes de soldados. "En una cultura donde la muerte se niega o se esconde, la mera exposición de la muerte es un acto político --explica Cusack--. Cuando la muerte afecta directamente a muchas familias, la negación se hace insostenible".