Muertos que parecen resucitar o desaparecen, puñales, flechas y espadas que se evaporan, diálogos modificados, escenas violentas suavizadas, exclamaciones como "¡Maldición!" que parecen haber quedado bajo una capa de típex... El Capitán Trueno, héroe de varias generaciones de españoles, creado por Víctor Mora y el dibujante Ambrós en 1956, protagonizó muchas aventuras luchando contra las injusticias del mundo pero no pudo evitar la que recayó sobre él en 1969, cuando el miedo a la censura provocó la mutilación y manipulación del material original. Ahora, un nuevo álbum de Ediciones B, El nuevo y genuino Trueno Color. Aventuras de El Capitán Trueno , sale para reparar el daño.

Fue en 1969 cuando Bruguera empezó a reeditar las historias, aparecidas en los cuadernillos apaisados de la colección Dan, en un nuevo formato vertical, dando origen a la revista Trueno Color . "El mercado había evolucionado y era lógico que la editorial lo hiciera en otro formato, y en color, que lo hacía más atractivo", explicaba ayer el guionista y especialista en cómic Antoni Guiral, que hoy, a las 17.30, participará en una mesa redonda del Salón sobre El Capitán Trueno y la censura y que ayer firmaba ejemplares de 11-M. La novela gráfica .

A la censura franquista, plasmada en un decreto de 1967 que prohibía resaltar "el terror, la violencia, el sadismo, el erotismo-", hay que añadir las modificaciones para adaptarse al nuevo formato: se falsearon medidas, se agrandaron viñetas, se añadieron nuevas, otras desaparecieron o se redibujaron. "Se hizo sin respeto por la obra original", dice Guiral, autor del prólogo de la nueva edición, versión facsímil de Trueno color que muestra la obra tal y como debería haber sido: sin censura ni mutilaciones.

Pese a la manipulación, la recuperación en el 69 tuvo un lado positivo. Según Guiral, hizo que "no cayera en el olvido" y su buena marcha comercial "favoreció la génesis de otras ediciones y, con ello, la revalorización del mercado del tebeo en la España de los años 70".