El actor español Javier Bardem aseguró hoy que afronta su candidatura a los Oscar este domingo con el convencimiento de que no tiene necesidad de ganar ningún galardón más y de que el hecho de trabajar con los hermanos Coen "ya es un milagro". En una conferencia de prensa celebrada hoy en Los Ángeles, a la que no se permitió la entrada a una decena de los periodistas españoles acreditados para el evento, Bardem aseguró que, para él, el éxito "ha sido haber trabajado con los hermanos Coen".

El éxito es "haber salido ileso, teniendo en cuenta la pinta que llevo, el acento con el que tenía que trabajar, estar rodeado de un equipo estadounidense y tratar de no parecer un alien". Bardem es candidato al premio a Mejor Actor Secundario por su papel de asesino en serie en la película "No Country For Old Men". "La candidatura la vivo con alegría, siempre la he vivido igual", subrayó.

En opinión del actor la colección de premios recibidos tras el estreno de la cinta, alrededor de 16, es algo "accidental, fortuito y bonito. Así lo vivo". A su vez, asegura que lo que más desea ahora, tras la entrega de los Oscar este domingo 24 de febrero "es que acabe todo esto y descansar" y afirma que si le dan el galardón "será estupendo y si no, diré que pena, pero solo me durará unos minutos".

Bardem, sin embargo, también reconoce que la categoría de Mejor Actor Secundario "es una de las más difíciles", ya que hay "una gran cantidad de talentazo ahí puesto en cada una de las interpretaciones. Me parece complicado e injusto decidir quién es el mejor. Es una lotería, un juego. Uno acepta este juego". Ante la pregunta de los periodistas sobre si considera que las cosas van muy rápidas se mostró convencido de que hay que tomar distancia. "Si no tomas esa distancia te vuelves loco. Uno lo que tiene que hacer es ponerse el traje de trabajar, y aunque la gente vea lo que hacemos los actores como algo frívolo y muy glamouroso, no deja de ser un trabajo extenuante. Hay que hacer un esfuerzo por distanciarse y no quedar sepultado bajo el eco que genera tu trabajo", opinó.

Agradecimiento a los Coen

Tras señalar que el mérito logrado es de los hermanos Joel y Ethan Coen, subrayó que, como actor español, pensó que era "imposible" y un "milagro" poder trabajar con ellos. "Trabajar con ellos es una fiesta, son gente que nunca renuncia al placer de trabajar. Se toman muy en serio su trabajo y en broma a sí mismos y por tanto no hallan nunca esa sensación casi sacra que algunos directores dan al rodaje", dijo Bardem, quien ya fue candidato a los Óscar con "Before Night Falls" en 2001.

Sobre si se siente embajador del cine de España indicó que él, como interprete español, aporta su "granito de arena, pero no creo que sea mi responsabilidad sacar mi bandera. Una de las cosas buenas que tiene el cine es que está más allá de las nacionalidades y los idiomas". En este sentido, también aseguró que el cine español "es el que es, con limitaciones pero con grandísimas virtudes".

En un momento dado de la conferencia de prensa, Bardem fue preguntado sobre el semblante serio que ofrece en público. "Yo nunca estoy contento. Bueno, si estoy contento, me estoy agarrando a las riendas", rectificó el actor y agregó que "hace falta una especia de filosofía zen para no perderse en tanto ruido", subrayó. Sobre su madre Pilar Bardem, que tiene previsto acompañar a su hijo en el paseo por la alfombra roja, expresó su deseo de que llegue a tiempo, dado que viaja ese mismo día. Agradeció que la compañía de la obra de teatro en la que trabaja su madre en Madrid ("La Sospecha") haya "tenido el detalle" de suspender la función el domingo para que pueda estar con él.

El cine estadounidense

Bardem tampoco tuvo dudas a la hora de hablar de la situación estadounidense y subrayó que tiene una "política económica de la que somos no sólo somos presos, sino también responsables". En relación al cine estadounidense, opinó que muchos cineastas estadounidenses "no tiene miedo de dar un paso adelante y poner el dedo en muchas llagas". En este sentido, apuntó que elegiría de este año películas de la cosecha de Hollywood como "There Will Be Blood", "Juno" o "Michael Clayton".

Por último, y ante la pregunta de si consigue el Oscar lo celebrará con la prensa española, dijo que no lo sabía. "Soy como una marioneta. ¿O no es verdad?", puntualizó. "A mi me cogen, me llevan, voy pidiendo cigarros y cosas de beber y de comer sobre la marcha. Yo imagino que lo celebraremos. Lo pediré, pero yo no tengo el poder de hacer eso". "Para que esto (la conferencia de prensa) sucediese he tenido que hacer una movida...Parecía que estaba pidiendo una audiencia con el Papa, vamos", dijo sonriendo.