Josep Carreras, de 59 años, tuvo el martes noche de estreno en Manresa (Barcelona). Y no precisamente lírica. Hasta allí se llevó a su nueva esposa, la azafata austriaca Jutta Jaeger, de 46, un antiguo amor con el que se casó "hace ya algún tiempo", según reveló el tenor tras un concierto en la población. "Estoy encantado de decirles que sí, que contraje matrimonio. Estoy encantado y contento", fueron las únicas palabras que le sacaron los periodistas. Su afirmación confirmó lo que en las últimas semanas era ya un secreto a voces.

Carreras también regaló las primeras imágenes de la pareja. Jutta Jaeger permaneció dentro de la basílica de la Seu mientras su marido cantaba con motivo del centenario de la Cámara de Comercio. Las fotos no llegaron hasta la despedida. Discretos, Carreras y su esposa no dieron muestras de afecto ante las cámaras, aunque no pusieron reparos en alargar su entrada en el coche para saludar al público.

La ratificación de la boda por parte de Carreras llega después de que su familia se esforzara en desmentirla. La noticia saltó hace un mes por declaraciones del padre de la novia, Bertram Jaeger, a la revista alemana Bunte: "Ya están casados. Hace dos meses que se dieron el en una ceremonia civil al borde del lago de Ginebra".

Ambos fueron pareja entre 1985 y 1991, tras conocerse durante un vuelo de Austrian Airlines. Su idilio se truncó, según la revista, cuando la austriaca vio que el tenor no tenía intención de separarse de su esposa. Cuando Carreras lo hizo, ella ya había contraído matrimonio. El destino quiso que la pareja volviera a cruzarse hace poco más de un año. Y desde hace unos meses, viven en Barcelona.