El Festival de Teatro Clásico de Mérida recibe hoy la producción extremeña de esta edición de la mano de la Karlik Danza Teatro, una joven aunque experimentada compañía que presenta la revisión más crítica del mito de Prometeo.
Memé Tabares, codirectora y autora del espectáculo, explicó que pese a la buena opinión generalizada que hay en torno a Prometeo, lo cierto es que su problema es "que intervino sin entender y comprender" lo que estaba haciendo, lo que le acarreó terribles consecuencias. Según explicó Tabares, a medida que indagaba en la historia del mito tenía cada vez más claro que no era el pretendido héroe, sino alguien "que roba algo que no era tan maravilloso".
ACROBACIAS La codirectora y coreógrafa de Prometeo, del fuego a la luz , Cristina Díaz, destacó que la representación cuenta con elementos teatrales, acrobáticos, de danza y música en directo que, sin duda, sorprenderán al público que se acerque al teatro romano. Para Díaz, la unión de su trabajo con el de Tabares es vital, puesto que si no es así, "somos como caballos locos, repletos de una creatividad y una fuerza incontroladas".
El director del festival, Jorge Márquez, recordó que es la tercera vez que el mito de Prometeo llega a la escena emeritense en los últimos años, al tiempo que dejó claro que la producción extremeña "ha dejado de ser un apéndice". El montaje de Prometeo que propone Karlik es un ejemplo claro, dijo, y se mostró "muy orgulloso" de la evolución del teatro extremeño en los últimos tiempos.
En este sentido, el director del Centro Dramático, Música y Audiovisuales, Marce Solís puso a Karlik como el mayor exponente de la evolución del teatro regional, al tiempo que calificó el montaje como "una obra de altos vuelos" a la que hay que asistir "con los sentidos abiertos".
