Francisco Carrillo afronta su tarea con el objetivo de mantener al público "fiel" y atraer al "reticente" y al joven mediante "la magia" de este festival y de los espectáculos que se celebran en el teatro.

Carrillo dijo a Efe que está "encantado" por la confianza depositada en él por el patronato del Festival y que "el lunes empiezo a trabajar con mi idea del proyecto".

El hasta ahora director de la Escuela de Teatro de Extremadura, con sede en Olivenza, tiene premios como el Max del 2003 al mejor espectáculo de revelación, ya formó parte de la dirección del Festival entre 1996 y 1999 como socio de la empresa productora Espectáculos Ibéricos, y ahora adelanta que trabajará para atraer "a todo" tipo de público, "al que va y al que no ha ido hasta ahora, o que ha ido poco".

También se declaró un enamorado de Extremadura, de su paisaje y de su paisanaje, y "he querido a este Festival desde que tuve oportunidad de verlo. Lo llevo muy metido dentro".