El escritor Tomás Martín Tamayo presentó ayer en Badajoz su última obra, El secreto del agua, una novela de intriga basada en el sentimiento de «añoranza» que encierran todos los pueblos «sumergidos» en las aguas de los pantanos.

El autor de Campillo de Llerena (Badajoz) recordó que existen 21 pueblos extremeños bajo las aguas, 108 en España, aunque «nunca se ahogan» del todo, pues quedan las vivencias, los pasos, los sentimientos o los ecos de sus pobladores.

En este caso, la obra está ambientada en el pantano de Alange (Badajoz), cuyo misterio se encuentra oculto en el agua y que por tanto se conoce cuando esta «desaparece», lo que permite rescatar y reconstruir el pueblo sumergido.

Según explicó, la obra, que transcurre desde la posguerra hasta la actualidad, contiene personajes que pueden ser «perfectamente reconocibles» en el ámbito político de hoy y que «quedan mal parados».

También hay personajes extremeños que sin ser famosos «tienen su intrahistoria», como por ejemplo Eulogio, capitán falangista basado en una persona que presumía de tener una de las camisas de José Antonio Primo de Rivera, que le regalaron en un mitin en Cáceres.

Además, aparece un maestro desterrado que era bisabuelo de Martín Tamayo.

Entre las similitudes con la realidad, también se encuentra que el pantano debería haberse retranqueado kilómetro y medio, con lo que el pueblo de Encinares no se hubiera sumergido.

Desde hace 65 años, con el libro La canción de la aldea, de Antonio Reyes Huertas, no se realizaba una obra sobre este tema en Extremadura, con personajes de aquí y contado además por un extremeño.

Se trata de la tercera novela del autor extremeño, que tiene una importante creación en narración corta, poesía o ensayo.

CUATRO AÑOS / La novela es fruto del trabajo de cuatro años «a una media de tres o cuatro horas diarias», explicó el que fuese diputado en la Asamblea de Extremadura, y tiene como eje el agua, un elemento muy utilizado por el autor en sus obras, pues en su ciudad natal «el agua escaseaba», señaló ayer durante la presentación en Badajoz.

Según explicó, su próximo trabajo será La amargura de Tiberio, continuación de El enigma de Poncio Pilatos, y también prepara una obra de más de 600 páginas sobre la caída de las Torres Gemelas neoyorquinas, en septiembre del 2001.