La batalla por acercar a los lectores libros que merecen la pena ser leídos se libra en la prensa, en la radio y en la televisión.

Representantes de medios de comunicación mostraron ayer en el Congreso Nacional de la Lectura de Cáceres, en una mesa moderada por el periodista extremeño Santiago Castelo, la manera en que trabajan para que descubrir libros y hacerlos llegar a los lectores. Sean La sombra del viento , de Carlos Ruiz Zafón, sea La insoportable levedad del ser , de Milan Kundera.

A cada lector, su libro, vino a decir Sergio Vila-Sanjuán, responsable del suplemento Culturas del diario La Vanguardia .

"Hay que tener en cuenta un público plural", coincidió Javier Rioyo, responsable del programa de libros de Televisión Española Extravagario .

Para Blanca Berasategui, directora de El Cultural (El Mundo ), "el gran dilema es hacer compatible la gran difusión con la calidad", y para Victoria Fernández, directora de Cuadernos de Literatura Infantil y Juvenil , "el papel de los medios de comunicación en el fomento lector es decisivo".

Sergio Vila-Sanjuán aplicó su experiencia previa como ayudante de librero, aconsejando sobre libros a los lectores, a su labor periodística. Es decir, decidiendo qué libros podrían interesar a gentes interesadas por diferentes clases de libros.

De manera que, en opinión de los periodistas que debatieron ayer en Cáceres, no hay que demonizar los libros ni hacer elitismo con ellos, ni tampoco denigrar los que lee la gente, como El código da Vinci , sólo porque la crítica se haya cebado con ellos. El medio de comunicación, explicó Vila-Sanjuán, tiene que hacer llegar llegar por igual un libro de poesía, de filosofía o un best seller , "aplicando a cada libro el criterio que le corresponde".

"Tengo una idea utilitaria de la cultura y creo que hay que salir del gueto de 20.000 lectores que dicen que tienen los suplementos de cultura. No creo que la cultura sea el lujo de unos pocos", dijo Berasategui.

Los medios deben hacer frente también al "vértigo de la producción editorial", en palabras de Berasategui (70.000 anuales, según la periodista) y sortear las presiones del mercado, de las editoriales. "Decidimos solos y nos equivocamos solos", dijo Javier Rioyo, quien presta atención en su programa "a los libros que se conocen menos, antes que a los best-seller , aunque hayamos sacado a Zafón".

Por su parte, Victoria Fernández reclamó mayor atención de los medios a la literatura infantil y juvenil, de la que se editan 10.000 títulos anuales y "es una especialidad ninguneada por la prensa"; pero sobre todo se refirió a la importancia de atender a la gente que no lee, que vive ajena a la cultura. Ello, dijo, pasa por la educación en la escuela, más allá de campañas publicitarias llamativas o multitudinarias fiestas populares.

El congreso cacereño concluirá hoy con la intervención de Fernando Savater y Víctor García de la Concha. A la clausura acudirán los Príncipes de Asturias.