En una acción sin precedentes, Namibia ha lanzado una serie de medidas severas contra los reporteros y los fotógrafos que se encuentran en el país para cubrir la visita de Brad Pitt y Angelina Jolie. De momento, el Gobierno namibio ha ordenado a tres paparazzi franceses que dejen el país si no quieren ser detenidos de forma inminente, según publicó ayer el dominical surafricano Sunday Times.

Otros tantos reporteros han recibido cartas emitidas por el director de Inmigración que les acusa de ser inmigrantes "prohibidos e ilegales". Según estas cartas, los periodistas tenían un plazo de 48 horas para abandonar Namibia si no querían ser detenidos.

Un oficial superior de Inmigración, Steven Mulundu, declaró que ésta es la primera vez desde la independencia del país en 1989 que a los periodistas se les ha forzado la salida de Namibia. La acción está defendida por el primer ministro de Namibia, Nahas Angula, quién, según recoge el dominical, mantiene que la pareja "merece protección", ya que Jolie está embarazada de ocho meses y se prevé que dará a luz en ese país.

"La señorita está esperando y la estáis acosando. ¿Por qué no le dejáis algo de intimidad? El acoso no está permitido en Namibia", sentenció Angula.

A pesar del revuelo, Pitt y Jolie han sido vistos paseando por las calles. A principios de semana se les vio en un restaurante de comida rápida en Walvis Bay, el miércoles en una joyería de Swakopmund, y en una tienda de animales, para comprar una tortuga a su hijo Maddox.