Un novedoso método de catalogación a base de tecnología informática ha permitido a los científicos reunir y ordenar de forma exhaustiva 3.116 inscripciones árabes y sus interpretaciones en castellano, situadas a lo largo de las paredes del Palacio de Comares, en La Alhambra granadina.

El Corpus Epigráfico de La Alhambra , presentado ayer en Madrid, consiste en un proyecto pionero, dirigido por el investigador del CSIC Juan Castilla e impulsado por el Patronato de la Alhambra y El Generalife.

En esta jornada ha sido presentada la primera entrega de un total de cinco DVD, con los que se pretenden tener catalogadas las aproximadamente 10.000 inscripciones árabes en La Alhambra, durante este año y el próximo. La recopilación y traducción de los epígrafes árabes del Palacio de Comares supone aproximadamente el 35% de las inscripciones que se calcula que existen en el recinto de la Alhambra.

El trabajo ha sido reunido en un libro y un DVD, con un coste de 30 euros en las librerías, que será de acceso público.

La exhaustiva catalogación, que será puesta a disposición del público, con la ayuda de las nuevas tecnologías que han sido básicas en este trabajo, según el director del proyecto, incorpora las aportaciones realizadas en su día por otros investigadores.

Según los investigadores, la traducción de los epígrafes en los muros de La Alhambra suscita interés desde tiempos remotos, es decir, desde el momento mismo en que los Reyes Católicos expulsaron a los árabes de Granada.

Este proyecto permite recorrer "de forma virtual" el Palacio de Comares. Así, se puede conocer por medio de un DVD no sólo el significado de una inscripción, sino ver dónde se ubica en el Palacio, y además cuantas veces se repite por sus paredes. Las menciones al lema dinástico de la dinastía nazarí, en las que se dice que "No hay más vencedor que Alá", en su traducción al castellano, dominan la temática de estas inscripciones, aunque también existen epígrafes piadosos, coránicos o jaculatorios con el nombre de Alá. Al contrario de lo que muchos pensaban, según el director del proyecto, las expresiones poéticas en las paredes de La Alhambra representan un porcentaje mínimo del total, y tampoco abundan los fragmentos del Corán.