El Grito y Madonna, los dos obras maestras del pintor expresionista noruego Edvard Munch que fueron robadas ayer a punta de pistola en el Museo Munch de Oslo, no estaban aseguradas contra el robo, según han afirmado fuentes del organismo encargado de asegurar los bienes de la municipalidad de Oslo."Los cuadros estaban asegurados contra incendio o contra inundaciones, pero no contra robo", ha declarado el director del Oslo Forsikring, John Oeyaas. "Se trata de obras irremplazables y no tenía ningún sentido asegurarlas contra el robo", ha añadido.Los expertos opinan que, dada su notoriedad, es imposible vender las dos obras y que el objetivo de los ladrones podría ser chantajear las compañías de seguros.Dos hombres enmascarados y armados irrumpieron ayer por la mañana en el Museo Munch de Oslo, donde, tras amenazar a un empleado del servicio de seguridad con un arma de fuego, se apoderaron de dos cuadros en menos de un minuto. Los dos ladrones huyeron en un vehículo robado desde el que les esperaba un cómplice.