La canción suena vagamente familiar, pero, esta vez, la declaración de divorcio es oficial: Noel Gallagher, cantante, guitarrista y compositor principal de Oasis, anunció el viernes por la noche a través de la web del grupo que se da de baja porque no puede seguir trabajando con su hermano pequeño, Liam, "ni un día más". Es un eslabón más de una larga cadena de crisis fraternales, pero, hoy por hoy, sitúa a Oasis a un paso del precipicio. En ausencia de reacciones por parte de la banda, las especulaciones sobre un Oasis sin Noel Gallagher resultan temerarias.

En la nota, el mayor de los hermanos, de 42 años, se confiesa liberado: "Con algo de tristeza y gran alivio os comunico que dejo Oasis esta noche. La gente escribirá y dirá lo que quiera, pero simplemente no podía seguir trabajando con Liam ni un solo día más".

Una violenta discusión con el cantante, que el mes que viene cumplirá 37 años, precipitó la decisión, consumada minutos antes de su concierto en el festival Rock en Seine, en París (donde el año pasado Amy Winehouse suspendió su show, también a última hora).

La cancelación se hizo extensiva a los compromisos en Constanza (Alemania) y Milán. El mánager anunció a los presentes que la banda "ya no existe", aunque este punto no ha sido confirmado por los otros músicos.

La relación entre ambos hermanos sufría una escalada de tensiones desde el pasado invierno. Cuando el grupo británico actuó en Badalona, en febrero, Noel advirtió que la gira podía ser "la última". En abril declaró que, a causa del deterioro de las relaciones, no habría un nuevo disco de Oasis en, por lo menos, cinco años, y apuntó que quería grabar en solitario porque disponía de canciones que no eran para el grupo.

AGRESIVIDAD Hace unas semanas, Liam Gallagher manifestó su deseo de que el disco de su hermano fuera "horrible" y dejó claro que la banda se tambaleaba. "Por primera vez en mi vida no tengo idea de qué va a pasar con Oasis. Es bastante confuso, pero no me voy a volver loco".

Durante estos meses, la guerra dialéctica alcanzó cotas comparables a los años 90, cuando no tenían inconveniente en insultarse y despreciarse mutuamente ante la prensa. Su agresividad resultaba graciosa y daba juego mediático, pero, por lo visto, reflejaba una animadversión real. Este mismo verano, Liam Gallagher era expeditivo: "El no me gusta y yo no le gusto. Es así de sencillo". Noel Gallagher le ha reprochado que aún no se ha molestado en conocer a su hijo Donovan, de 19 meses.