Pepe de Lucía asegura que el flamenco, el tango y el jazz son "tres culturas unidas por el ritmo", algo que le ha llevado a emprender un nuevo proyecto discográfico Tomo y obligo , un disco con el que este cantaor, hermano de Paco de Lucía y padre de Malú, prosigue una carrera de fondo, ajena, dice, "al consumo".

En Tomo y obligo le ha dado "el quejío del flamenco" a tangos clásicos de entreguerras como el que da título al álbum, uno de los muchos que de niño escuchaba constantemente, casi como una nana, en la voz de su madre, y a otros tan conocidos como Volver , Yira, Yira , El día que me quieras o A media luz .

"El tango lo he llevado siempre en las raíces", explica, en una entrevista con Efe, este cantaor que se inició en la música de niño, cuando con su hermano, el célebre guitarrista Paco de Lucía, formó un grupo llamado Los Chiquitos de Algeciras.

El cantaor también es letrista --suya es, entre otras, esa de Cómo el agua que su hermano y Camarón de la Isla convirtieron en un clásico-- y productor de un numerosos artistas flamencos.