Cuando los responsables de los premios Grammy prepararon el clásico in memoriam en recuerdo de los artistas fallecidos el último año, la definición escogida para Ray Charles fue "leyenda musical". A la hora de votar, los 11.000 miembros de la academia discográfica de Estados Unidos alimentaron esa leyenda. Genius loves company , un disco póstumo de dúos, fue premiado el domingo en la ceremonia en Los Angeles con ocho galardones, incluyendo los de mejor disco del año, mejor disco de pop y mejor sencillo por Here we go again , con Norah Jones, otra de las muestras del talento de Charles para el cruce de géneros.

La 47 edición de los Grammy se convirtió en un homenaje al artista fallecido en junio, que en 1987 ya había recibido un premio a toda su carrera. Pero fue, además, la confirmación del talento de Alicia Keys, que ganó cuatro premios; el reconocimiento a un ecléctico panorama de artistas que van desde Kanye West hasta Loreta Lynn pasando por Green Day, y, al menos en palabras de Bono, el líder de U2, "la mejor edición" de los últimos años.

Si la música de Charles obligaba a la nostalgia, la actuación en directo y el discurso de Kanye West, que casi perdió la vida en un accidente de tráfico y que fue premiado por el mejor disco de rap, The college dropout , hablaban de la intensidad del presente.

REVELACION Hubo en la ceremonia premios para casi todos. West se vio superado en el premio al artista revelación por el grupo Maroon 5. Y los votantes se atrevieron a premiar lo que las radios de country han preferido despreciar: el disco de Loretta Lynn Van Lear Rose .

Vertigo , de U2, fue reconocida como mejor canción de rock y Green Day --cuya actuación en directo obligó a trabajar a los censores estadounidenses cuando Billie Joe Armstrong hizo un gesto con el dedo-- se llevó el premio a mejor disco del género por American idiot . Otro disco de contenido político --The revolution starts... now , de Steve Earle, fue premiado con el Grammy al mejor disco de folk contemporáneo. John Mayer, que se había resistido a editar Daughters como sencillo, se llevó el Grammy a la canción del año.

Los premios confirmaron también la influencia del rhythm and blues. Usher ganó el Grammy al mejor disco de R&B contemporáneo. En la vertiente clásica del género el triunfo fue para The diary of Alicia Keys .