La representación de Proserpina ha sido la obra más comentada y que más polémica ha creado hasta ahora en esta edición del Festival. Quizás debido a que parte del texto está en inglés o a la complicada puesta en escena que dificulta el entendimiento de la obra, el espectáculo causó una extraña reacción en el público. Hubo un sector de espectadores que al finalizar el espectáculo mostró su inconformidad mediante silbidos y abucheos y otro sector que arropó el teatro con sinceros aplausos.

El murmullo en las gradas durante la obra fue general, y así lo reconoció el director del Festival, Jorge Márquez, quien admitió que nunca había oído tantos comentarios entre los espectadores a la salida de una obra ni que se creara tanta polémica en torno a un espectáculo, lo que por otra parte, le alegraba "porque mantiene vivo al Festival".

Emma Suárez, declaró que disfrutó mucho en el estreno y aceptó la respuesta que el público mostró al término del espectáculo, ya que "cuando uno hace una representación en un lugar público está expuesto a todo tipo de reacciones". Afirmó que es "una obra muy especial y no se puede llegar a todo el mundo".