Las celebraciones de su centenario no se han hecho esperar. Samuel Beckett, mundialmente conocido por su obra teatral Esperando a Godot (1952) y máximo exponente del existencialismo de vanguardia, recibe estos días en Londres y Dublín, su ciudad natal, un homenaje conjunto con motivo de los 100 años de su nacimiento, que se celebra mañana. El acontecimiento pone de manifiesto la impresionante dimensión del legado de unos de los autores más importantes del siglo XX.

El Gate Theatre de Dublín y el londinense Barbican han unido sus esfuerzos y han puesto en marcha un macrofestival en el que, desde el pasado 21 de marzo y a lo largo de seis semanas, están subiendo a los escenarios todas sus piezas teatrales. La práctica totalidad de las actividades culturales que se presentarán en la capital irlandesa lo harán también en la inglesa.

La contribución del autor al teatro del siglo XX no ha sido valorada como se merece. O por lo menos esta es la opinión de Michael Colgan, director del Gate Theatre y organizador del festival, que considera que Irlanda ha hecho suyo a James Joyce, su otro hijo ilustre, y ha olvidado completamente a Beckett. Esa opinión puede parecer injusta, pero hay que tener en cuenta que Beckett abandonó su país muy joven y, aunque nunca renunció a su nacionalidad de origen, vivió durante 60 años en Francia escribiendo en inglés, pero mayoritariamente en francés.

Uno de estrenos que más expectación ha despertado es Eh Joe , que corre a cargo del director de cine canadiense Atom Egoyan. Se trata de un montaje multimedia de 25 minutos aclamado por la crítica, que es el

único que tras estrenarse en Dublín no podrá verse en Londres. Otro director de cine, el británico Charles Sturridge, habitual de las series de televisión de la BBC, dirigirá Final de partida , sin olvidar que uno de los platos fuertes será la versión que Walter Asmus de Esperando a Godot . La última cinta pondrá en dificultades interpretativas al gran John Hurt, que la protagonizará.

CINE Y ARTES PLASTICAS A estos montajes se suman la lectura de su obra poética y en prosa, así como la proyección de las piezas que el autor escribió para la BBC y de Film , un cortometraje en blanco y negro muy raro de ver protagonizado por un maduro Buster Keaton y dirigido por Alan Schneider. I not I es un propuesta que reúne no sólo toda esta obra cinematográfica sino que también la vinculan con la influencia que la obra de Beckett ha irradiado en creadores plásticos como Philip Guston y Bruce Nauman. La artista norteamericana Jenny Holzer aprovecha la celebración para proyectar textos del autor de Esperando a Godot en la fachada de edificios londinenses.

Distintos simposios reunirán también en Dublín y Londres a expertos internacionales que glosarán su figura, y varias exposiciones mostrarán recorridos por la vida y la obra de uno de los escritores más intensos y representativos de las inquietudes humanistas del siglo XX.