El cantante placentino Robe Iniesta hizo vibrar anoche, Día de Extremadura, a los asistentes a su concierto en el Teatro Romano de Mérida, en un espectáculo lleno de poesía y rock incluido en la programación del Stone and Music Festival.

Las primeras notas de su guitarra auguraban que Robe daría un auténtico recital de música en el Teatro Romano, que se prolongó más allá de la una de la mañana, según informa la organización del certamen en un comunicado de prensa.

El espectáculo empezó con luz tenue y con "El cielo cambió de forma", sencillo incluido en su actual trabajo "Destrozares", su segundo álbum en solitario marcado con la esencia propia del artista: canciones reivindicativas y de repulsa social.

Con el paso de los temas, el público se fue enganchando al ritmo del artista que canción a canción consiguió crear un ambiente especial.

Los espectadores cantaron cada uno de los temas disfrutando de un sonido perfecto que llenó de poesía y rock cada rincón de las caveas del teatro emeritense, se añade.

El éxito estaba asegurado pues el cantante fue el primer artista en colgar el cartel de "todo vendido" cuando aún quedaban meses para su cita en el Stone and Music Festival, actuación dentro del tour con el que el cantante recorrerá España hasta finales de noviembre.

"Momentos exclusivos para días especiales", fue lo que el cantautor pretendía transmitir un día más que señalado en el calendario de la mayoría de los asistentes.

El Día de Extremadura, 8 de septiembre, no podía celebrarse de otro modo que con el que ha sido el embajador musical por excelencia de la Comunidad Autónoma y Medalla de Extremadura.

Por ello, haciendo gala de esto no faltaron las palabras de orgullo por pertenecer a la tierra e incluso se pudieron ver varias banderas de la región portadas por los asistentes al concierto.

Uno de los momentos más especiales de su actuación fue cuando el público coreó la palabra "Extremadura" sin parar, justo antes de los bises.

El exlíder de la mítica banda Extremoduro también homenajeó a su antiguo grupo con algunos de sus temas más conocidos.

Cada acorde de su guitarra resonaba en completa armonía entre las columnas del abarrotado Teatro Romano de Mérida.

El cantante y su excelente banda se mostraron más que entregados a su público que le correspondía en pie con aplausos y manos roqueras en alto.

Minutos antes del concierto, Robe recibió de manos de los portavoces de la asociación Acción por el Mundo Salvaje, AMUS, la pieza de Terracota que se regala de forma exclusiva a los artistas que participan en esta edición del festival.

Una pieza que contiene tierra de la boca del teatro emeritense y que emocionó al artista que lo agradeció en varias ocasiones.

Robe no sólo estuvo acompañado de su legión de fans, pues el artista Manolo García también quiso disfrutar del concierto del cantante extremeño.