Rocío Carrasco podrá por fin hacer realidad uno de sus mayores sueños: casarse de blanco y por la Iglesia con su actual novio, Fidel Albiac. El Tribunal de la Rota de Madrid ha confirmado la nulidad eclesiástica de su matrimonio con el exguardia civil Antonio David Flores, padre de sus dos hijos. Rocío inició una relación con el sevillano Albiac hace ahora ocho años, y con la pareja viven desde entonces los niños de ella, Rocío, de 10 años, y David, de 8.

El Tribunal de la Rota ha acabado por darle la razón a la joven, pese a que su exmarido siempre se opuso a la nulidad. Ahora podrá hacer realidad su deseo de casarse de nuevo por la Iglesia. "Yo soy creyente y creo que debe ser así", ha manifestado Rocío.