Que los músicos no están precisamente felices con el retorno económico que reciben por poner su música a disposición de Spotify no es ningún secreto. Y un artículo en Vulture en el que se denunciaban los clones cutres que se habían colado en la plataforma (un Bob Segar que suplanta a Bob Seger, versiones que utilizan mil y un trucos para colar como originales) pero también se levantaba la sospecha de que el servicio había encontrado otra forma de pagar aún menos: producir música ambiental sin autor al que pagar derechos, pura marca blanca. Una acusación que se basaba en un artículo de hace ya un año del medio especializado Music Business Worldwide.

En sus artículos la revista ha detectado en listas temáticas como Yoga & Meditation, Ibiza Sunset, Pop Chillout, Chillout, Peaceful Piano, Yoga Music, Sleep, Yoga & Meditation y similares hasta 50 autores de los que no existe rastro alguno pero que acumulan millones de escuchas. Pero solo ahora se ha viralizado la información, tras lo que la compañía ha reaccionado finalmente.

“No creamos ni nunca hemos creado artistas falsos ni los hemos puesto en las listas de reproducción de Spotify. Es categóricamente falso. Pagamos royalties por todas las piezas en Spotify, y por todo lo que incluimos en las listas. No somos propietarios de los derechos, no somos un sello discográfico, y toda nuestra música es cedida por los propietarios de los derechos, a quienes pagamos; no nos pagamos a nosotros mismos", ha sostenido un portavoz de la compañía citado por la BBC.

Lo que implica que Spotify podría estar encargando a discográficas música ambiental firmada por 'negros' sin descartar, según las fuentes de la industria citadas por la BBC, que lo haga a cambio de unos 'royalties' por los suelos. Nada que roce lo delictivo de, por poner un ejemplo, otro 'muzakgate', la 'rueda' de la SGAE con la música de fondo nocturna de las televisiones españolas. Pero que da nuevos motivos de preocupación a los creadores, y a las grandes discográficas con las que está negociando duramente los términos de sus contratos.

Sin embargo, la revista que lanzó la acusación hace un año vuelve ahora a la carga y lista 50 'autores' de los que no se sabe nada que suman 520 millones de escuchas en Spotify. Superan los 20 millones de escuchas Gabriel Parker (24.9 millones), Charlie Key (23.6), Ana Olgica (23.5), Lo Mimieux (22.3), Greg Barley (21.4), Otto Wahl (27), Piotr Miteska (26.7) y Karin Borg (24.2).

DOS AUTORES SUECOS SOSPECHOSAMENTE PROLÍFICOS

Y en una última actualización de su información, ha detectado que detrás de muchos de ellos se encuentran dos músicos de estudio,Andreas Romdhane y Josef Svedlund, afincados en Estocolmo, donde fue creada la multinacional del 'streaming' .