Hay ocasiones en que la contaminación enriquece. En el plano cultural ocurre casi siempre. Este es el concepto en torno al cual el director teatral Pietro Cennamo ha puesto en marcha, en la pequeña ciudad polaca de Jelcz-Laskowicw, Melodrama 2010 o, lo que es lo mismo, el I Festival Europeo de Escuelas de Teatro, con la participación de compañías de Polonia, Italia, Francia y España, representada en este caso por la Escuela Superior de Arte Dramático de Extremadura.

"La idea es acostumbrar al público y a los actores a un teatro que nazca de verbos no conjugados y por ello disponibles a transformarse a las posibilidades que nacen de los encuentros, de los desencuentros, de la contaminación de lenguas y metodologías distintas, ni siquiera necesariamente nuevas", explica Cennamo, que dirige el colectivo Theatralia, de Livorno, encargado de la organización del festival.

Durante una semana, academias de cuatro países europeos han compartido sus realidades formativas. "El fin es que se rediscutan a ellas mismas y se enriquezcan en la comparación", añade Cennamo, un dramaturgo que trabajó con el gran director polaco Jerzy Grotowski, destacada figura del teatro de vanguardia del siglo XX.

La obra que ha representado durante tres días la escuela extremeña es Montañas de Yo , dirigida por Carmen Galarza.

Los elogios

En ocasiones hay que huir lejos para encontrar, o para que nos ayuden a encontrar, lo mejor de uno mismo. Este ha sido el caso del montaje extremeño, que ha maravillado a la gran mayoría del público y los profesionales participantes en el certamen teatral.

"La escenografía es fantástica, muy bella", reconoce el director artístico del certamen, Alain Leonard, una institución del teatro europeo tras dos décadas al frente del Festival de Avignon. La opinión de Leonard es doblemente interesante por cuanto no domina el castellano y no pudo entender los textos de Montañas de Yo . Se guió, exclusivamente, por tanto, por la fortaleza y la pasión imprimidas en la escenografía, la puesta en escena y la interpretación de los actores. "Lo esencial del teatro es algo más que la palabra, las diferencias lingüísticas se pueden superar con la intensidad y la emoción", justifica.

Lo mismo le debió ocurrir a los vecinos de esa pequeña torre de Babel en la que se convirtió la carpa donde se representó Montañas de Yo , ya que el montaje extremeño encandiló al público.

¿Pero qué es Montañas de Yo ? Su directora lo explica: "Partiendo de la dicotomía que constituye el yo social frente al yo oculto, hemos creado un entramado donde las cuatro esferas que forman parte el hecho escénico --autor, dirección, actores y público-- comparten, a puerta cerrada, el mismo espacio... Y en él nos enfrentamos a las preguntas, a los miedos, a las fantasías, a los deseos del ser humano, todo lo que constituye la propia Montañas de Yo de cada uno de nosotros".

Galarza asegura que el público puede verse reconocido en fragmentos por cuando autoretrata de alguna forma al ser humano, con sus alegrías, sus penas, sus inquietudes, sus miserias...

Una anécdota puede definir la repercusión de Montañas de Yo en el festival. La noche del estreno, al regresar al albergue donde han dormido los actores estos días, una nota de sus compañeros italianos encima de sus camas rezaba: "Lo que vosotros hacéis sí que es teatro".

El responsable de la expedición extremeña en Polonia es José Ramón Alonso de la Torre, director de la Escuela Superior