Con teatro, talleres, concursos de dibujos y disfraces de magos se recibió ayer, en toda España, la publicación de Harry Potter y el misterio del príncipe , la sexta entrega de las aventuras del estudiante de magia más famoso del mundo, y el que ha conseguido que millones de niños lean.

En El Corte Inglés de Badajoz, por poner un ejemplo de Extremadura, a primeras horas se habían vendido 500 ejemplares, de los que 240 eran de las reservas, a cuyos compradores se les entregó un diploma y pósteres alusivos al libro. La librería estaba adornada con carteles y adornos relacionados con Harry Potter, informa Fernando Léon.

La editorial Salamandra, que publica el famoso libro de J.K. Rowling, consiguió mantener la incertidumbre, incluso en lo que se refiere a la portada, hasta las 18.30 horas, hora en la que los "magos" vendedores realizaron su operación de márketing y destaparon el vellocino de oro, es decir, el libro que leerán millones de niños de habla hispana.

En la portada de la nueva entrega aparece Harry Potter, ya no tan niño, con el anciano profesor Dumbledore, ambos con la varita en la mano y con gafas, a bordo de una barcaza en medio de un resplandor.

Así, el libro ya está a la venta en España, América Latina y Estados Unidos, con una tirada inicial que supera el millón de ejemplares y con varias versiones para adaptarse a los modismos idiomáticos de cada zona.

En Madrid, en una de las librerías más céntricas, la Casa del Libro, el mago Aisman, campeón de ilusionismo de España, fue el encargado de hacer aparecer los libros ante una multitud de muchachos, muchos de ellos de 18 años, como Yolanda, quien ataviada con un disfraz de bruja, aseguró a Efe que su generación había crecido con Potter. "A muchos nos ha abierto las puertas hacia otras lecturas", señaló.

En otra de las grandes superficies, la FNAC, los niños y mayores que se acercaron al centro, recibieron una chapa de la escuela de magia Hogwarts y, en compañía de un mago y una maquilladora, que ayudó a los más jóvenes a disfrazarse, consiguieron hacer menos dura la espera para adquirir su volumen.

"No me lo esperaba así", dijo a Efe Joaquín, de 17 años, en referencia a la portada del ejemplar. Hermion, Ron y otros amigos tampoco faltaron a la cita, y divirtieron a los más pequeños con juegos de magia, retratos de los asistentes y otras representaciones teatrales. El éxito de la venta y la fiesta por la publicación se repitió en toda España.