Contemplar internet como el futuro frente de batalla de la industria discográfica es un error. No es el futuro, sino el presente. La experiencia del portal Itunes Music Store (de Apple), que no es la única pero sí la más revolucionaria y de mayor impacto (de ahí proceden 7 de cada 10 canciones compradas en la red), revela que la venta de canciones on line es ya, a finales del 2004, una alternativa a las declinantes ventas de discos y a los polémicos intercambios gratuitos de ficheros.

El proceso está en marcha en Estados Unidos, en algunos países europeos y, en menor medida, en España, un mercado aún en observación, con una tasa de piratería muy por encima de la media en el mundo desarrollado, y donde la compra on line aún no está consolidada entre los hábitos del ciudadano medio. Pero, pese a las incógnitas, el arranque de Itunes ha provocado reacciones. Esta semana, Mario Pacheco, presidente de la Unión Fonográfica Independiente, ha calificado el comercio on line como "el presente de la música", pero ha denunciado que las multinacionales "obtienen un trato de favor en el emergente mercado de las descargas".

Seguridad y calidad frente a las descargas gratuitas son, según los responsables de estos portales, las claves del éxito. "Los servicios ilegales prosperaron porque no había alternativas legales. Si se da a la gente una buena selección de música, y descargas rápidas y de alta calidad, preferirán esa opción a las ilegales", ha asegurado Peter Lowe, director de mercado de Apple.

LAS VENTAS En un año y medio, Itunes ha vendido 150 millones de canciones en Estados Unidos a 99 centavos la unidad. A este lado del Atlántico, el portal arrancó con fuerza (800.000 canciones en su primera semana) pese a que el precio por canción fijado en la zona euro, 99 céntimos (es decir, 1,34 dólares al cambio actual), ha sido objeto de algunas críticas.

Itunes ha marcado tendencia en la supresión de suscripciones y cuotas mensuales, y la posibilidad de transferir los archivos musicales al disco compacto y a cinco ordenadores.

Intimamente unido al portal figura el iPod, reproductor de archivos mp3 con capacidad para almacenar hasta 10.000 canciones. Parte de su estrategia es ofrecer exclusivas, como la primera canción de los reformados Pixies, o rarezas de grupos como Estopa o El Canto del Loco. En España, Itunes abrió sus puertas a finales de octubre con un catálogo de 700.000 canciones. Ya no está sola en este sector del mercado: Wanadoo acaba de abrir su propio portal, que ofrece 400.000 títulos a 99 céntimos cada uno.