Verónica Lario, esposa de Silvio Berlusconi, vuelve al ataque después de que exigiera excusas a su marido por sus coqueteos con varias mujeres en una cena de gala. En una entrevista en la revista Diva y Donna, Lario asegura que su esposo "es un político pero no un primer ministro". "Yo no he cometido una falta de estilo que le perjudicara. Para mí y para mi familia he pedido lo mismo", sentencia.