Un vídeo ganó ayer por primera vez el premio internacional de artes plásticas Obra Abierta de Caja Extremadura. Su autor es Sergio Belinchón Hueso, un valenciano de 43 años que ha querido documentar la evolución del spaghetti western americano y de los escenarios de Huesca donde se rodaron muchos de ellos. Todo contado en 16 minutos a través de la figura de un cowboy , un vecino de la zona que siempre quiso participar en las películas y nunca pudo.

Como "una campanada" calificó ayer el presidente de Caja Extremadura, Víctor Bravo, el hecho de que el premio, dotado con 15.000 euros, se lo haya llevado un vídeo, pero subrayó que "merece la pena verlo" y señaló que posiblemente se colgará en la web de la Obra Social de la entidad o "habrá que hacer una edición para distribuirlo". Además, se mostró "enormemente satisfecho de estar aquí".

Por su parte, para el autor, el premio ha sido "un subidón, una alegría. Es muy importante que sigan existiendo premios de este calibre que apoyan la creación". Una creación a la que la María del Mar Lozano Bartolozzi, miembro del jurado, animó. "Ha sido difícil elegir", dijo, entre 992 obras de Europa y América, pero destacó de la ganadora su "calidad, poesía, nostalgia...".

42 obras seleccionadas por el jurado permanecerán expuestas hasta el 22 de abril en el centro Las Claras de Plasencia. Además y, como novedad, hasta esa misma fecha estará en marcha una subasta virtual de 36 de esas obras gracias al proyecto Galería solidaria , que Víctor Bravo destacó por sus fines benéficos, a favor de Unicef y dijo que la intención es mantenerlo.

Explicó que la galería consiste en una puja, que se abrió ayer y se mantendrá también hasta el día 22 a través del enlace www.tumejorobra.es/galeriasolidaria, y donde aparecen las obras, cada una con un código y un precio de salida (entre 420 y 23.100 euros), puesto por cada autor más un 5%, que será lo mínimo que se llevará Unicef.

A partir de ese precio, todo será para la oenegé, que lo destinará a los niños afectados por la situación de emergencia en Siria. También para colaborar con Unicef y como colofón, Caja Extremadura patrocinó una cena en el Hotel Alfonso VIII.