Situada a los pies de la sierra de Castelar, fue en época árabe lugar clave entre los reinos de Sevilla y Badajoz. Al final del XIV pasó al Señorío de Feria en la persona de su primer duque Gómez Suárez de Figueroa. El segundo duque de Feria construyó en 1437 el alcázar, actual parador de turismo. El trazado urbano es medieval, con calles angostas y el caserío en torno al alcázar. Cercano a éste están la Plaza Grande y la Plaza Chica.