Es uno de los cuatro empresarios que han avalado la vuelta del baloncesto a Cáceres. Amante del deporte y de los proyectos humanitarios, Martín reflexiona en esta entrevista sobre el club de LEB Oro.

--Como impulsor del proyecto, ¿cómo valora estos dos años de ´vida´?

--Sin duda, intensos, con dos años en los que hemos partido de cero, adquiriendo los derechos de Leb Plata precipitadamente y haciendo una gran temporada tras una primera vuelta agridulce en lo deportivo, pero muy satisfactoria en cuanto a club. Este segundo año, que debía ser de consolidación en Plata, nos pasó un poco lo mismo. La incertidumbre hasta final del verano de la liga en la que militaríamos nos ha hecho llegar algo tarde.

--¿Cree que el Cáceres es viable económicamente con los actuales parámetros?

--La situación global nos está afectando a todos por eso hay que agradecer su aportación a todas los patrocinadores públicos (Marca Extremadura, Ayuntamiento, Cáceres 2016 y Diputación) y los privados (cuyo número aproximado mantenemos aunque congelando o recortando su aportación por la situación económica). En lo público hemos tenido de todo: la institución regional ha dado un gran impulso al proyecto aunque no se haya llegado a la cantidad óptima, la provincial sí ha aumentado, mientras que la local ha mantenido las aportaciones pese a la nueva categoría. Y el club mantiene prácticamente los precios a los abonados de Plata en la Leb Oro.

--¿Firmarían la misma ayuda institucional y privada para los próximos años?

--Será difícil, pero es necesaria si queremos competir. Firmaría la pública porque hemos logrado un equipo competitivo sin tener uno de los presupuestos importantes, pese a lo que se quiere hacer ver desde algunos sitios. Y firmaría la privada ya que, aunque la crisis nos afecta, en caso de agudizarse la echaríamos bastante de menos.

--¿Por qué no se ha convocado aún una asamblea de socios?

--No somos una sociedad, los socios que están capacitados para convocar una asamblea son muy pocos y todos están inmersos en la estructura del club. Nosotros tenemos un número grande de abonados pero no son socios como si esto fuera una sociedad ni hay nadie que tenga acciones.

--Deportivamente, ¿se puede aspirar al ascenso a la ACB?

--No en el primer año ni hasta que nos consolidemos en la categoría. Pero yo no estaría en ningún proyecto que no aspirase a lo máximo, siempre y cuando se den las condiciones. No es lo mismo conseguir el ascenso que jugar la ACB. Afrontamos cada competición como cada partido para ganarlas. Hay que ser conscientes de saber donde estamos y no querer correr antes de andar.

--¿Cuál sería, para usted, una buena clasificación este año?

--Teniendo en cuenta un verano de incertidumbre hasta saber que jugaríamos LEB Oro y la consecuente confección tardía del equipo y una pretemporada menos planificada de lo que nos hubiera gustado, unido a las renuncias y las lesiones, estamos haciendo un buen papel en el año de consolidación en la categoría, para nosotros es suficiente no pasar apuros. Sin embargo, espero que cuando la situación se normalice podamos entrar sin problemas en play off.

--¿Qué opina sobre el debate establecido sobre la figura del entrenador, Piti Hurtado?

--A todos se nos puede pedir más cosas. Pero creo que a Piti no se le pueden cuestionar ni su entrega, ni sus conocimientos porque los ha demostrado cuando el pasado año cogió un equipo sin fuerza, que no competía y nos sacaban los colores y lo llevó hasta los play off y la fase final, y no llegamos a la final por un controvertido encuentro. Este año las adversidades nos han condicionado, pero nadie nos ha sacado de la pista y eso le ha ocurrido a Breogán, Alicante o Burgos. Esto nos anima a tener paciencia y confianza en el proyecto, en el entrenador y los jugadores. Equivocaciones y asignaturas pendientes tenemos todos, pero todo hay que medirlo en forma global. No se puede dudar del entrenador.

--¿Considera que la afición es suficiente o esperaban más?

--La afición que va al pabellón es la que le gusta y sabe de baloncesto. Los posibles, cosa que nos encantaría, sería consecuencia de ir ganando partidos y estando arriba en la clasificación. Tenemos una afición a la que se respeta muchísimo.