El entrenador del Atlético de Madrid durante las dos últimas temporada, Luis Aragonés, ha puesto en manos del abogado Fernando Pérez Espinosa la tramitación de su finiquito con el club colchonero.
La situación es tensa después de que el presidente de la entidad rojiblanca, Enrique Cerezo, enviara una carta al técnico en la que se daba por terminada la relación entre la institución y el veterano preparador, sin que ello suponga indemnización alguna.
Fernando Pérez Espinosa intentará, según declaró ayer, buscar una salida "amistosa" al problema. El abogado pretende retomar las negociaciones en el punto en el que estaban antes de que Cerezo enviara el ya famoso documento. En ese momento, los agentes de Luis habían llegado a un acuerdo con el club acabar con la etapa de Aragonés en el banquillo rojiblanco a cambio de unos 900.000 euros, la mitad de lo acordado para el año de vinculació que les restaba.
EVITAR LOS TRIBUNALES
Luis Aragonés y su abogado pretenden evitar el paso por los tribunales. La principal diferencia residía en las formas de pago, ya que el técnico de Hortaleza pedía cobrar la indemnización en efectivo, mientras que los dirigentes del Atlético habían propuesto pagar a plazos. Si no se llegase a un acuerdo, el caso se trasladaría al Tribunal Jurisdiccional de la Real Federación Española de Fútbol.
