Ademar (16+21): Jorge Martínez; Juanín (3), Morros (-), Colón (3), Prendes (-), Metlicic (8), Krivoschlykov (7), -siete inicial-, Kjelling (11, 3 penalti), Entrerríos (4), Vatne (-), Castresana (-), Erevik (ps), García Parrondo (-), Curuvija (1).

Zagreb (15+10): Matosevic; Pongracic (2), Vukovic (1), Vori (1), Majnov (6), Goluza (3, 1 penalti), Horvat (3),-siete inicial-, Spoljaric (3), Bilic (6, 2 penalti), Blazicko (ps), Stritof (-).

Arbitros: Oie y Togstad (Noruega). Excluyeron por dos minutos a Vatne por el Ademar y a Horvat por el Zagreb.

Marcador cada cinco minutos: 2-5, 6-7, 8-10, 12-11, 14-11, 16-15 (descanso), 20-17, 24-20, 27-22, 30-22, 33-24, 37-25 (final).

El Ademar puede empezar a saborear su segunda Recopa después de lograr una amplia victoria por 37-25 ante el campeón croata RK Zagreb, que tendrá que soñar con una remontada muy difícil, también por los escasos goles conseguidos a domicilio.

Sin embargo, los leoneses huyen del exceso de confianza después del varapalo que sufrieran la temporada pasada cuando ganaron por una renta de 13 goles al Celje Pivovarna esloveno, pero luego perdieron la eliminatoria a domicilio y eso llevó en volandas a su rival hasta el título de la Liga de Campeones.

Pero el Zagreb no es, ni de largo, el Celje, pese a sus cinco campeones mundiales y olímpicos con Croacia, porque su veteranía y escaso banquillo acabó pasándoles factura en la segunda mitad en la que fueron humillados por el conjunto de Manolo Cadenas que fue un auténtico vendaval. El Zagreb acabó hundido y agotada y estuvo a merced de los españoles, que lograron un triunfo con contundencia.