Explosión de alegría en el baloncesto placentino. El Adepla Gastrobar Cáparra consiguió ayer el ascenso a la Liga EBA después de derrotar en la final de la Primera Nacional extremeña de baloncesto al Grupo Preving BCB (82-73). El choque, disputado en el Pabellón de Cristal de Plasencia, se decidió prácticamente en la primera parte, cuando el anfitrión se despegó. Luego ya supo administrar la ventaja.

El gran favorito para llevarse el título y el premio de subir era el Adepla, un club joven que lleva un tiempo creciendo y tratando de coger protagonismo en el basket placentino. Su entrenador es Jesús Porras, todo un veterano que ha aglutinado una plantilla con experiencia y mucha capacidad atlética. Esas fueron las principales armas para destrozar al Grupo Preving, campeón hasta ayer, en un primer cuarto rompedor (28-19) que se vio ampliado por el segundo (45-29).

La clave fue probablemente que el protagonismo anotador estuvo mucho más repartido en el bando vencedor. Aldji Kasse alcanzó los 19 puntos y estuvo muy bien secundado por Ibrahima Niang (17), Chema Santos (16) y Matt Brunell (15). Este además capturó 12 rebotes y junto a Kasse (13) mantuvo a raya Manuel Carpi y Daniel Brioa. Dani Callejo, con 33 puntos, estuvo demasiado solo en ataque, llevando el peso de la anotación pacense. Sus compañeros tuvieron un día negro desde la línea de tres puntos.

El triunfo placentino no llegó a peligrar pese a que el Grupo Preving ganase los dos últimos cuartos (15-18 y 22-26). Al final, la fiesta se desató entre la emoción general, destacando la del presidente del Adepla, Juancho Álvarez, que hace apenas dos años cogió el relevo de su hermano Rafael tras su muerte.

Aunque es casi una tradición que el campeón extremeño de Primera renuncie al ascenso a EBA al ser un salto muy fuerte que exige añadir una cierta dosis de profesionalismo a la plantilla y a la estructura del club, la intención del Adepla sí es subir. Habrá que ver qué encaje hay entre los dos equipos de la ciudad en la misma liga.