CACERES

Ha dejado el deporte de élite de interesar en Extremadura? Las directivas y aficiones de los grandes clubs se quejan de la falta de apoyos empresariales e institucionales para superar sus crecientes problemas económicos, pero un vistazo a las gradas de sus estadios o pabellones en los últimos tiempos no los deja en buen lugar. Un estudio realizado por este diario indica que los espectáculos de primera línea en la región atraen a mucho menos público que hace cinco o incluso diez años.

La cuestión es sumamente peliaguda. El deporte en la comunidad autónoma ha alcanzado sus cotas más altas ascendiendo a la máxima categoría de varias disciplinas (un hecho difícilmente imaginable a finales de los años ochenta), pero el público en general parece haberse aburrido o, al menos, no sigue a sus equipos con el mismo interés. Las causas son variadas --el fin de la novedad , la congelación de las aspiraciones deportivas, otras ofertas más cómodas...-- y entre ellas también pueda contarse la propia crisis económica de los clubs. Algunos ejemplos son significativos.

CACERES CB: DE LA EXPLOSION SOCIAL A SER EL EQUIPO ACB CON MENOS PUBLICO

Hace relativamente poco era totalmente inimaginable que el Cáceres fuese el equipo de la ACB con menor asistencia media de público: apenas 3.400 espectadores por partido, un número considerablemente inferior al que se acreditó durante al menos los primeros cinco años en la Liga ACB (1992-1997). Las 5.000 personas que imperturbablemente acudían al V Centenario parecen haber pasado a la historia, considerándose una gran asistencia las 3.800 que hubo el domingo ante el Real Madrid. Las entradas no se agotan nunca y el club ha intentado rebajar los precios y hacer promociones, pero el multiusos sigue teniendo el triste récord de no haberse llenado nunca desde su inauguración en 1999... si se exceptúa un mitin de Joaquín Almunia en el 2000.

BADAJOZ: EL CASO MAS SANGRANTE, CON APENAS MIL PERSONAS EN SEGUNDA DIVISION

De todas las situaciones que se dan en Extremadura, seguramente la del Badajoz sea la más llamativa. Es el equipo de fútbol que más alto está, pero apenas consigue atraer a mil personas a sus encuentros. Sólo el Eibar cae tan bajo en Segunda División. Al igual que el Cáceres, abandonó un recinto inadecuado para instalarse en una casa nueva y lujosa, el Nuevo Vivero, pero parece que eso ha resultado contraproducente. Como ejemplo, en la temporada 97-98 el doble de espectadores de los habituales ahora (2.400) asistían a los enfrentamientos frente al Xerez y el Numancia. La cifra es incluso ligeramente superior en un Badajoz-Racing de Santander en febrero de 1993, siempre en Segunda.

EXTREMADURA: HACE CINCO AÑOS ACUDIAN 7.000 PERSONAS Y AHORA SE PROMEDIAN 3.000

La de Almendralejo siempre ha sido considerada una afición fiel y que, respecto a la población de la localidad, acudía masivamente a seguir al Extremadura. Ahora, en Segunda B, las cifras no son malas, unos 3.000 espectadores por partido, pero el pasado cercano lleno de éxitos de los azulgranas contiene datos espectaculares. Por ejemplo, hace cinco años eran líderes en Segunda y 6.800 aficionados presenciaban la visita del Numancia. Esa era la tónica habitual.

CACEREÑO: EL LIDERATO NO HACE TODAVIA ´DESPERTAR´ A UNA AFICION DORMIDA

Durante años el Cacereño se caracterizaba por perder aficionados sin freno, en plena decepción y el auge del baloncesto en la ciudad. La asistencia media al Príncipe Felipe durante los últimos cuatro años, en Tercera o Segunda B, ha rondado con dificultades los 1.300 espectadores, siendo generosos. Ahora el equipo vive su mejor momento reciente con el primer puesto en la categoría de bronce , pero el hincha no acaba de despertar y apenas se alcanzan los 2.000. La operación rescate para Félix Campo se presenta de largo recorrido y para citas como la del viernes frente al Cádiz --televisada por La 2-- se han regalado entradas e, incluso, se decidido con el Cáceres que entren gratis sus abonados en una iniciativa sin precedentes.

MERIDA: LA COMPARACION TRAS HABER ESTADO EN PRIMERA DIVISION ES UN LASTRE

800 aficionados acuden como promedio esta temporada al Mérida, una cifra poco menos que ridícula. La capital autonómica parece desmoralizada tras haber disfrutado en dos ocasiones de la Primera División y después haber visto desaparecer al club por las deudas. Ahora en Segunda B son tiempos duros, con un descenso de público respecto a la pasada campaña e incluso respecto a la anterior, en la que el nuevo Mérida empezó desde cero en Tercera. A los nostálgicos les resultará sarcástico que en enero de 1998 el entonces estadio Romano José Fouto presentase una entrada de 9.000 personas ante el Espanyol (Primera) y que en 1993 unas 3.500 acudiesen al Mérida-Bilbao B, antes de la reforma de la instalación.

LA SEGUNDA DIVISION B REVITALIZA ZAFRA Y EN BADAJOZ 'SE RECONQUISTA' EL BALONCESTONo todo es negativo. Dos casos son sintomáticos de mejoría de la situación: el Díter Zafra apenas reunía a 400 espectadores hace cinco años y ahora casi triplica esa cantidad. La clave es sencilla, ya que el club segedano militaba en Tercera y ahora lo hace en Segunda B. Caso similar es el del baloncesto en Badajoz. El Círculo de la Liga LEB-2 tiene un seguimiento de casi 1.500 personas, bastante alejado del que consiguió hace tres temporadas cuando marchaba líder en la LEB (unos 4.500), pero es que hace un lustro no había ni tan siquiera equipo en categoría nacional.CASOS EN LOS QUE NADA PARECE CAMBIAR DEMASIADO, NI POR ARRIBA NI POR ABAJOHay lugares en los que la expectación con la que son seguidos sus equipos no varía demasiado con los años. En general son sitios más pequeños que las grandes ciudades extremeñas. Por ejemplo, el Jerez siempre tiene una parroquía escasa, pero fija, de unos 700-800 espectadores, muy poquitos más que los que pasaban por taquilla en Tercera División. Lo mismo le pasa al Moralo, que en 1998 estaba en Segunda B y tenía 1.000 seguidores, casi igual que ahora. Al Plasencia de baloncesto le pasa lo mismo: su gran momento actual atrae a unas 1.000 personas --2.500 en la última Copa LEB-2--; hace cinco años era líder en la EBA (por entonces segunda categoría nacional de baloncesto) y 1.200 presenciaban el choque ante el Peñarroya.LOS DEPORTES MINORITARIOS NO 'ENGANCHAN' MAS QUE A LOS HABITUALES 'CLIENTES' H1aber logrado niveles altos en actividades minoritarias en los últimos años no las han transformado en cuanto a atención general. Al Don Frío Cáceres de baloncesto femenino, pese a su gran temporada, acuden aproximadamente 300 personas; otro tanto ocurre con la AD Cáceres de la Liga FEV, el rugby de Primera División o el Almendralejo de tenis de mesa. En fútbol femenino, con el triunfal Puebla y el Corderex, las entradas también son bajas.