Situación al mismo tiempo agradable e incómoda para el Al-Qazeres Extremadura, que esta noche recibe al Spar Gran Canaria (20.45 horas, pabellón Serrano Macayo) sabiendo a ciencia cierta que ni jugará los playoffs por el título ni bajará. Así es que la cuestión ahora es buscar estímulos en estas tres jornadas que restan en la Liga Femenina.

El primero de ellos es acabar con la racha de seis derrotas consecutivas que ha hecho que el equipo caiga del quinto al décimo puesto. Su última victoria se remonta a enero, antes incluso de disputar la Copa de la Reina. Y, más allá de eso, es importante terminar con buen sabor de boca porque además el calendario puede ayudar: hoy el rival es un equipo descendido matemáticamente y después llegarán los otros dos equipos que ocupan las tres últimas posiciones, El Pastor Zamora y CREF Hola.

«No porque estén descendidas va a ser un partido fácil», advierte Jacinto Carbajal, que recuerda el dato de que Gran Canaria lleva en la segunda vuelta dos victorias, exactamente las mismas que su equipo. «A ambos se nos están resistiendo las victorias por muy poco», comenta el técnico. Tampoco olvida que el Al-Qazeres ya perdió en la ida (74-66) en un partido en el que tiró por la borda su trabajo en unos últimos minutos desastrosos. No es de extrañar que tenga un buen concepto de las canarias. «Tienen muchas jugadoras extranjeras y mucho físico. Vendrán sin presión para intentar sumar algún partido más», analiza.

Será el primer partido sin la gigantesca Duby Dacic (2,01 de estatura), traspasada a principios de esta semana al Osmaniye turco. «Se tiene que notar. Creo que era la jugadora más en forma del equipo, promediando en los últimos partidos 16-18 puntos y 10 rebotes. El resto tienen que intentar dar un paso adelante y que su baja se note lo menos posible», aventura Carbajal, que dará más minutos a Miriam Forasté y Silvia Romero. Pese al contratiempo, sí admite que la salida permitirá «jugar más dinámicos, con alguna alternativa en defensa más riesgo que hemos trabajado esta semana para dar matices a nuestro estilo sin ella».

Más allá de eso, Carbajal no prevé más experimentos ni despojar de identidad al Al-Qazeres. Quiere ganar y el mejor modo de hacerlo es manteniendo la línea que ha permitido cumplir el objetivo de la permanencia sin apuros. Ni siquiera se plantea los partidos que restan como un casting para el futuro. «¿Pruebas? Pues tampoco muchas. El club ya tiene suficiente información de cara al proyecto de la próxima temporada», apunta.