Empieza esta mañana (12.15 horas) un intenso ciclo para el Al-Qazeres, que jugará tres partidos en siete días con la clasificación para los playoffs como estímulo. El de hoy es en Zaragoza, ante el Mann Filter, un posible rival en esa pelea, que tendrá su continuación el miércoles en el Serrano Macayo contra el Uni Ferrol. Muy inasequible y casi lúdico será la nueva cita del sábado ante el multicampeón nacional, el Perfumerías Avenida, también en casa.

Está en una disyuntiva el conjunto de Jacinto Carbajal: o seguir haciendo historia acabando la liga regular entre los seis primeros (o al menos lucharlo) o que se le haga la temporada muy larga, conseguida prematuramente la permanencia y habiendo participado ya en la Copa de la Reina. Encontrar la motivación y el «hambre» (expresión literal del entrenador) es el gran desafío de este mes y medio que viene.

Tener una mejor puesta en escena que en la reciente derrota ante el IDK Gipuzkoa es la meta inmediata. Aquel día hubo que remar contracorriente hasta el 66-71 final. También hay que recuperar la competitividad lejos de Cáceres.

Enfrente estará un oponente que no lo pondrá fácil. El Mann Filter es noveno, justo por debajo del Al-Qazeres, con una victoria menos. No está tampoco en un momento boyante (tres derrotas consecutivas), pese a que su plantilla contiene jugadoras de enorme calidad como la anotadora Roneeka Hodges. No faltan los centímetros (196) de la subcampeona olímpica Lucila Pascua.

«Es un equipo que empezó con dudas y luego se ha ido asentando. Tiene todavía opciones de meterse arriba, es versátil y está bien trabajado», analizó Carbajal. En el otro banquillo estará Víctor Lapeña, uno de los técnicos emergentes del basket femenino y habitual de las selecciones nacionales de categorías inferiores. Este verano ejerció como asistente de Lucas Mondelo en Río-2016.

Jugar tres partidos tan seguidos con una rotación tan escasa como la suya preocupa al técnico cacereño, que deseó poder dosificar a sus mejores jugadoras, aunque anunció que no variará los habituales roles, con Irena Vrancic y Mariona Martín compartiendo casi equitativamente la dirección, Ameryst Alston y Pam Rosanio jugando el 80% de los minutos en las alas, Julie Forster descansando muy poco y Miriam Forasté y Duby Dacic alternándose como como acompañantes bajo el aro.

«Si hay que quemar aquí las naves, las vamos a quemar», aseguró Carbajal. Sabe que sumar una única victoria en estos tres partidos le pondría en una situación muy favorable de cara a la recta final, que su equipo cerrará ante los tres últimos clasificados. Zamora, Gran Canaria y CREF podrían no jugarse nada por entonces.