El Alburquerque, necesitado de puntos, recibe mañana a las cinco de la tarde en el Municipal al líder del grupo extremeño de Tercera, el Villanovense Ofigevi. El entrenador del Alburquerque, Julián Caro, opina que vencer "a un equipo casi profesional hecho para ascender como es el Villanovense será una empresa difícil, pero no imposible". Caro cree que la motivación de sus jugadores será extra. "Por un lado es una final para nosotros que estamos al borde del abismo, quintos por la cola y a un punto del descenso; por otro la presencia del líder motiva a cualquiera". El míster confía en su bloque que estará prácticamente al completo y en las dimensiones del campo de juego. "Al ser pequeño puede ser un handicap para ellos puesto que su mayor peligro viene por las bandas y aquí intentaremos pararlos".