A muchos les extrañó que Alexis Jones apareciese ayer en la pista del Multiusos con un algo parecido a un neceser. ¿Qué es eso?, le preguntaron sus nuevas compañeras del Nissan Al-Qazeres Extremadura. «Es una máquina de hielo portátil. Lo necesito para mis articulaciones», respondió la escolta norteamericana. Varias se arremolinaron para ver cómo funcionaba, claro.
La escolta norteamericana, con la vitola de campeona de la WNBA, ha aterrizado bien en Cáceres. Se mostró sumamente educada con todos, además de exhibir una enorme predisposición para el trabajo.
De hecho, se dudaba que fuese a entrenar por la tarde, ya que había completado un larguísimo viaje desde Dallas, pero se empeñó en hacerlo. Su vuelo llegó hasta Lisboa, donde fue recogida por un empleado del club. El equipo organizó una comida para recibirla.
A Jones la conocía previamente Shayla Cooper. Ambas se enfrentaron en la liga universitaria y posteriormente entraron en la última edición del draft de la WNBA. Posteriormente tuvieron suerte dispar: mientras la pívot fue descartada por el equipo que la eligió, Chicago Sky, Jones se acaba de proclamar campeona con Minnesota Lynx.
En la sesión a las órdenes de Jacinto Carbajal dejó algunos buenos detalles, sobre todo por su condición de zurda, aunque físicamente se le notó el lógico cansancio.
No tendrá mucho tiempo para adaptarse. Con toda la documentación en regla, debutará el domingo en la localidad barcelona de Sant Adria de Besós. Según contó, nunca había estado en España, pero la conocerá casi de punta a punta a través de la ventana de un autobús. Resopló cuando preguntó de cuántas horas constará el trayecto.
Con Miriam Forasté
Para una mejor adaptación e intentando evitar los grupitos, el Al-Qazeres tiene la filosofía que las norteamericanas no compartan piso y se integren lo máximo posible con las nacionales. La compañera de Alexis Jones será Miriam Forasté.
Más allá de las anécdotas, su incorporación alterará inevitablemente la rotación en la plantilla y no sería de extrañar que ante el Sant Adria fuese ya titular y contase con un buen número de minutos. En las dos últimas derrotas el Al-Qazeres ha adolecido de tiro exterior, una de sus especialidades. Y en 20 días debe despejarse la duda sobre la continuidad de Marta Urbaniak, a la que se le firmó un contrato temporal --pero prorrogable-- debido a que se temía que Jones no pudiese estar disponible al principio.
