El administrador único del Badajoz, Luis Cano Lebrato, anunció ayer la firma de un convenio de colaboración entre el consejo de administración del club y la asociación Ambición Blanquinegra para la gestión deportiva, económica y social del club con vigencia de un año.

El consejo elaboró un escrito en el que argumentaba que al haberse producido la dimisión del presidente del consejo, Manuel Pérez Lozano, el consejo se reunió el pasado día 20 "pero ninguno de los actuales miembros hemos querido ocupar el puesto vacante de presidente y consejero delegado, dada la situación en que a su vez se encuentra la sociedad al existir un litigio sobre la compraventa de la gran parte de las acciones en que se divide su capital social".

Luis Cano entiende que desde el punto de vista legal "no es admisible una dimisión en pleno del Consejo y hemos decidido continuar en nuestros puestos hasta que se resuelva la compraventa para no dejar a la sociedad sin su órgano de administración".

Cano cede los poderes a Ambición Blanquinegra, una asociación presidida por Alvaro Roa. "Ha mostrado plena disposición para hacerse cargo provisionalmente de la gestión deportiva y de los recursos económicos de la entidad hasta tanto no se resuelva el litigio de la compraventa", argumenta.