El derbi se vivió de manera muy intensa en la grada pues ambas aficiones sabían de la trascendencia del choque. Por parte local, la afición volvió a responder dándose cita alrededor de 6.000 espectadores, pero también tiene mucho mérito el desplazamiento de 500 aficionados serones en un club que tiene unos 1.200 abonados.

Las gradas fueron un auténtico termómetro del choque. En la primera mitad se hicieron notar los locales desde el inicio y fue incrementándose la fiesta local conforme caían los goles. El arranque fulgurante de los serones en la segunda parte con dos goles muy pronto, provocaban el delirio en el fondo norte, que eran donde estaba la afición visitante. Con el empate y cuando peor lo pasaba el Mérida, tras unos tímidos silbidos por el juego del equipo, la grada volvió a intentar llevar a su equipo en volandas en busca de la victoria que no llegó.

Ambos entrenadores se mostraban contentos por el trabajo que habían realizado sus jugadores. Por parte del técnico local, Eloy Jiménez analizaba que había sido lo que se esperaba “un derbi igualado” dándole mérito a su equipo pues se ha enfrentado «a un equipo muy bueno, que está arriba en la tabla siempre». Eloy se mostraba esperanzado en que su equipo puede terminar arriba «queda mucho, y vamos a pelear hasta el final, que nadie lo dude». También quiso felicitar el técnico a la afición porque «ha creado un ambientazo».

Por su parte, Manolo Sanlúcar explicaba que “hemos hecho el partido que queríamos”. Reconoce que los dos goles del Mérida «fueron dos mazazos pero lo estábamos haciendo bien, más allá de los errores puntuales de los goles, por eso en el descanso hablamos que teníamos que seguir igual aunque poniéndole más intensidad pues sabíamos que sí hacíamos el primer gol pronto, eso el Mérida lo iba a notar porque se iba a dar el efectivo ellos ir hacía abajo y nosotros hacia arriba, y creo que se ha dado así». Sanlúcar afirma que «después del segundo ya no me ha gustado, nos ha faltado tranquilidad». Con respecto a la jugada del penalti sobre Paco Aguza, el técnico serón indica que «no valoro a los árbitros, pero creo que el penalti del Mérida lo es, le saca la camiseta».