"Sí, ha empezado la pretemporada bastante bien para mí. Estoy contento también porque este es un gran grupo, con muchas ganas de trabajar". Quien así se pronuncia es Antonio Amaro (Salamanca, 23 de abril de 1992), el fútbolista que más está llamando la atención en el nuevo Cacereño.

Amaro llega a El Periódico Extremadura exhibiendo timidez, pero se suelta pronto, como lo está haciendo en el equipo de Angel Marcos manejando al equipo desde la posición de mediocentro. "Mi sueño, claro, es llegar lo más alto posible". ¿Primera División? No lo descarta, pero con humildad. De hecho, durante sus cinco años en el Valladolid fue citado para un partido de Copa del Rey.

De hecho, en su historial figura la convocatoria con la selección española sub-17, en la que, por poner un ejemplo, coincidió con el barcelonista Sergi Roberto. ¿Por qué, de momento, no ha llegado más alto? "Esto del mundo del fútbol es muy difícil", asume con claridad.

Con el Valladolid B --estuvo en la estructura del club pucelano cinco años-- ascendió hace un par de temporadas a Segunda División B con dos jugadores cacereños: Zubi y Teto y también con el emeritense Lolo Pla, de los que tiene las mejores palabras. "Grandes jugadores todos ellos", proclama con claridad.

Dotado de muy buena técnica, puede jugar también como media punta, y sus características se asemejan a las de un compañero en el Cacereño, David Cuerva. "Seguro que podemos jugar los dos", pronostica. "Todos podremos jugar", añade el futbolista salmantino.

El pasado año militó en la UD Logroñés y disputó la fase de ascenso a Segunda B. Su marcha del club riojano está íntimamente relacionada con la falta de confianza del entrenador, pero él sigue creyendo en sí mismo y en eclosionar futbolísticamente en Cáceres. "El técnico tiene mucha confianza en mí, por eso y por estar cerca de mi casa he venido aquí".

Con dos goles en pretemporada en su haber, se marcha a su casa del centro de Cáceres a descansar. Marcos les ha dado dos días libres. Vive solo hasta que llegue su novia, cuenta en cuanto a lo personal un futbolista al que se le intuye una pasión por el balón propia de los grandes. De momento, el charro, la verdadera revelación de la pretemporada verde, lanza un mensaje a modo de arenga: "que la gente apoye, que se hagan socios, que van a disfrutar con nosotros". El, de momento, se ha puesto en el escaparate como excelente reclamo.