AUSTRALIA: (8+11) Varkanitsas, Deane (4), McCormack (4,1p), Hoppner (2), Calvert (2), Bader (1), Ramadani (3) -equipo inicial- Latinovic (p.s.), Abuhamed (-), Taylor (1), Jackson (1), Parmenter (1), Van Bussell (-).

ESPAÑA: (27+24) Hombrados, Entrerríos R. (4,1p), Garralda (1), Lozano (7,1p), Hernández (4), Pérez (5), García (8,3p) -equipo inicial- Barrufet (p.s.), Entrerríos A. (2), Rocas (5), Garabaya (4), Davis (6), Romero (4) y Rodríguez (1).

ARBITROS: Lauren y Nielsen (Dinamarca).

M. C. C. M.: 2-3, 2-9, 5-13, 6-17, 7-21, 8-27 (descanso), 10-30, 13-35, 15-38, 16-43, 17-47, 19-51.

España, con récord de mayor goleada incluido (51-19), pulverizó a una débil selección de Australia, una de las más asequibles del grupo C del Campeonato del Mundo de balonmano.

España sigue calentando motores. Ayer solventó sin dificultad alguna el segundo ensayo, un calco del encuentro con Japón, aunque los australianos carecieron de la velocidad que imprimieron los nipones.

La selección española logró una escandalosa y humillante victoria sobre Australia, con la que pulverizó el anterior récord que ostentaba desde el 25 de enero del 2001 cuando goleó a Estados Unidos 45-18 en el Campeonato del Mundo de Francia.

El compromiso frente a Australia tan sólo se diferenció de una sesión de entrenamiento porque minutos previos al choque sonaron los himnos.

PRUEBAS Juan Carlos Pastor de nuevo aprovechó todos sus enseres y el tránsito en el banquillo fue una constante con el fin de dar minutos a todos los jugadores para que se vayan aclimatando al campeonato, aunque sin correr riesgos.

Australia nunca tuvo argumentos para cuestionar ni un ápice la superioridad de España, que ya se marchó al descanso con una renta de 27-8.

Tras un primer parcial de reconocimiento, Australia se mantuvo cerca de diez minutos sin encontrar la portería de Hombrados, mientras los españoles ensayaban sus disparos desde todas las posiciones.

Los hombres de Pastor no tuvieron ninguna necesidad de forzar la máquina. En la retaguardia, España no dejó respirar al rival. La contienda se quebró definitivamente en el segundo tiempo, en el que todos los jugadores españoles contribuyeron a cebar el resultado.

Tras la jornada de descanso de mañana, la verdadera competición para España comenzará mañana a partir de las 20.15 horas frente a Suecia, uno de los contrincantes directos, junto a Croacia, en la lucha por enganchar la posición más cómoda del grupo para plantarse en la segunda fase.