El pésimo estado del césped del estadio José Pache de Badajoz, totalmente inundado por las lluvias torrenciales, impidió que se pudiera disputar ayer el encuentro Cerro de Reyes-Real Madrid Castilla, que fue aplazado. Tendrá que disputarse un miércoles por la noche ya que hasta final de temporada no quedan domingos libres e incluso la jornada del Cerro-Alcorcón se disputará también entre semana.

Un cuarto de hora antes del comienzo del choque, el árbitro andaluz Pino Blanco comunicó a los equipos que habría que esperar un poco más a que tomara una decisión. Sin embargo, la visita a su vestuario del presidente del Cerro de Reyes, Antonio Olivera "Cachola" y el representante madridista Antonio Ruiz, exponiéndole que los dos equipos estaban de acuerdo en aplazar el partido hizo que se agilizaran los trámites. La decisión final siempre corresponde al árbitro pero si los clubes coinciden, el proceso es más rápido. A las doce y cinco de la mañana se comunicó oficialmente la decisión.

"¿Nos beneficia o nos perjudica? Esto se sabrá cuando hayamos jugado, pero las decisiones hay que tomarlas antes", argumentó el técnico del Cerro de Reyes, Faustino Bueno "Tinín", para añadir que "si el campo está en buenas condiciones y perdemos, la gente dirá porque no se jugó aquel día y si ganamos, habremos acertado", dice Tinín.

Como entrenador, expuso que "no se podía jugar al fútbol, era un peligro para la integridad de mis jugadores". Desveló que algunos de ellos querían jugar, "y siendo egoístas, jugar al Madrid le perjudicaba más porque son mas técnicos que nosotros".

Por último Tinín explicó que nunca había visto en tan mal estado el José Pache. "La mayoría del campo tenía verdaderas lagunas, escupiendo una cantidad de agua impresionante".

Para el Cerro-Castilla, Fran Miranda, sancionado ayer, podrá jugar ya que debe cumplir su sanción en el próximo partido que dispute su equipo, en este caso en Torrelavega ante la Gimnástica.