Luis Aragonés sigue enfadado con la prensa y no está dispuesto a rectificar su decisión de no hablar con los periodistas salvo en las ruedas de prensa reglamentarias después de los partidos ante Dinamarca y Finlandia. El resto del tiempo mantendrá el ´pico´ cerrado. Ayer, tras el primer entrenamiento de la selección en las Rozas para preparar el decisivo encuentro del sábado, Aragonés volvió a dejar muestras de su malestar con los informadores. Cuando el técnico se dirigía a los vestuarios, un reducido grupo de aficionados le reclamó desde la grada la presencia de Raúl González.

"¿Por qué no llevas a Raúl?", le preguntaron, y Luis respondió: "Os engañan esos", refiriéndose a los periodistas que esperaban en la grada. Luis se siente perseguido. Cree que hay una campaña orquestada en su contra para echarle de su puesto antes de tiempo y no quiere saber nada de los periodistas.