España comienza la cuenta atrás ante el trascendental estreno en la Eurocopa el próximo día 10 contra Rusia y lo hace con buenas noticias para el técnico Aragonés, que a cuatro días del debut ha constatado que recupera efectivos.

Así se pudo apreciar el segundo día de estancia de la selección en la localidad austríaca de Neustift y el primero de trabajo sobre el campo de entrenamiento situado en un valle de ese bonito paraje.

Allí, sobre un césped húmedo debido a una fina pero casi continua lluvia, se ejercitaron los hombres de Aragonés, incluidos Andrés Iniesta y Fernando Torres, quienes están a disposición del técnico para el martes.

El delantero del Liverpool parece haber superado totalmente las molestias en el tobillo que le mantuvieron renqueante los últimos días, y el centrocampista del Barcelona, uno de los principales valores de Luis, ha superado una gastroenteritis producida por una infección alimentaria. Ahora le falta recuperar fuerzas. Por eso no completó el entrenamiento.

VILLA, PREOCUPACION El principal problema de Luis sigue siendo la evolución de David Villa, quien, junto a Sergio García, se ejercitó en un campo anexo al principal donde lo hicieron el resto de sus compañeros. El entrenador parece tener claro que el dibujo ante los rusos va a ser el clásico 4-4-2 y para ello necesita a David Villa junto a Fernando Torres en la punta de ataque.

España toca mucho balón, pero muestra una alarmante falta de profundidad y echa en falta más dosis de agresividad. Además, el método de los jugones en la parcela ancha del terreno de juego deja a Torres muy desasistido en ataque. Por todo ello, lo más normal es que ante Rusia sean dos los puntas que se alineen desde el principio.

Y en ello está Aragonés, que durante el entrenamiento pidió a su jefa de prensa que no permitiese que micrófono alguno grabase sus palabras hacia los jugadores, y que está deseando que llegue la hora de la verdad, el momento de enfrentarse a Rusia. La selección aguarda ese día trabajando en unas condiciones óptimas. El hotel de concentración tiene todo tipo de detalles para la comodidad de los jugadores y el entorno y la temperatura son muy agradables.

España ha escogido para su estancia durante la primera fase del campeonato un lugar acogedor y que ya ha albergado otros importantes eventos deportivos.

Innsbruck y el Tirol fueron dos veces anfitriones de los Juegos Olímpicos de Invierno y sigue acogiendo competiciones como carreras de esquí de la Copa del mundo y los tradicionales saltos del primer día del año en Bergisel. Además, por sus impresionantes montañas han transitado etapas del Giro.