Mide el Cáceres 2016 esta tarde en León (19.00 horas) el grado de realidad de su despertar del miércoles ante La Laguna y cuál es la onda expansiva del efecto Gustavo Aranzana . Es un choque del mismo tipo, ante un rival de la zona media-alta de la tabla, aunque con el componente de dureza que se requiere cuando se juega fuera. Y, para alimentar titulares periodísticos, no le faltará la dosis de morbo: el nuevo entrenador cacereño es una persona fundamental en la historia de su hoy rival, al que ha ascendido dos veces a la ACB.

Cuando los jugadores salten a la pista se habrá cumplido una semana desde el cambio de técnico. De momento, todos los efectos han sido buenos: el cambio de ambiente, algunos detalles del juego y, sobre todas las cosas, la victoria. Conseguir otra equilibraría el balance en la clasificación y haría mirar con incuestionable optimismo un tramo benigno del calendario.

Aranzana está cambiando poco a poco los mecanismos internos del equipo, no solamente los tácticos. Por ejemplo, con su antecesor, Manuel Hurtado, se solía viajar después del entrenamiento matinal. Ayer no: el autobús partió a las 8.00 hacia León, donde por la tarde se completaría una sesión exigente en el escenario del choque. También esta mañana habrá trabajo: hay muchos aspectos que se quieren variar.

"Nos enfrentamos a un equipo con mucho talento sobre todo en el juego interior. Nosotros vamos con ambición, sabemos que podemos hacer las cosas bien", asegura el entrenador del Cáceres 2016. "Si llevamos el partido a nuestro terreno podemos ganar, a medio campo, hacer un partido duro y que sus secundarios tengan que estar mucho tiempo en pista", aventura, percibiendo una mejoría en los jugadores. "Vamos cogiendo conceptos, sobre todo en defensa. De lo que más contento estoy es de la intensidad en el trabajo que estamos demostrando. Solo pido que podamos estar a gusto y no tener lesiones", explica.

EL PASADO Aranzana mantiene que tiene "grandísimos recuerdos" del León y de la ciudad, donde dice tener "buena parte de la vida hecha". Fueron doce años en su banquillo con dos momentos cumbre, en 1990 y 2006. Pero asegura que no se dejará llevar por el romanticismo, "que está para otros aspectos de la vida". Hasta el entrenador rival, Javier de Grado, fue jugador suyo y recientemente le ha tenido de ayudante durante tres años: "Lo que más me va a apetecer será ganarle".

El duelo de los bases entre el local Juanjo Bernabé y el visitante Alex González tendrá similares connontaciones. El primero es un histórico del extinto Cáceres CB que compartió vestuario con su hoy oponente la pasada campaña. González se perfila como titular, aunque compartirá los minutos con Perico Sala en la dirección. Por dentro, Aranzana puede seguir confiando en Diego Guaita de inicio.

El León recuperará a Rick Hughes, que lleva tres semanas fuera de juego por un problema en un codo, pero tiene las dudas de última hora del otro pívot norteamericano, Ryan Humphrey, y del alero nacional Jorge Calvo.