"El partido ha sido duro, como todos, pero el equipo ha estado serio, muy sólido. Sabíamos que ellos iban a salir fuerte al principio, con mucha gasolina, que había que defender bien a sus bases y a Mohamed. Después teníamos que dominar con nuestro juego interior para generar espacios para los de fuera y es lo que hemos hecho", analizó Gustavo Aranzana, entrenador del Cáceres 2016, después del encuentro, elogiando además el trabajo de David Mediano en la dirección y de Pablo Movilla supliéndole unos minutos.

Según apuntó el técnico, "ganar nos servirá para conseguir confianza, pero tenemos que seguir trabajando, porque esto no ha hecho nada más que empezar. Desde luego que, aunque hayamos ganado, hay cosas que tenemos que corregir, como algunos errores defensivos que hemos cometido, y otros aspectos del juego".

Para Aranzana, la lesión de Dominick Martín en el primer cuarto --no pudo volver a jugar-- no había favorecido en absoluto a su equipo. "Luego el Lleida nos ha hecho daño jugando con dos cuatros , aunque luego hayamos sabido resolverlo", apuntó.

También dijo que buscar la acumulación de faltas de otro jugador interior como Dwayne Curtis había sido buscado previamente por su equipo tras estudiar al Lleida en los partidos de pretemporada. "Es un rookie en esta liga y aún no entiende algunas cosas del arbitraje", dijo.