Lance Armstrong, siete veces campeón del Tour de Francia, declaró en México que su retirada "ya no es oficial" y ha dejado en suspenso su posible retorno a la competición, tras la polémica originada ante su supuesto dopaje por EPO en su primera victoria en el Tour del 99.

"Con todo lo que ha pasado, con todo lo que han dicho en Francia, ahora puedo decir que mi retirada no es oficial", dijo Armstrong en la capital mexicana, donde habló ante un foro de 10.000 jóvenes organizado por la empresa Teléfonos de México.

El ciclista comentó que le gusta mucho su vida actual, con su novia y su familia, aunque a ellos "no les guste que esté pensando seguir en el ciclismo, pero creo que me puedo probar a mí mismo que aún puedo competir en el nivel más alto".

Armstrong, que volvió a recalcar que nunca se ha dopado, señaló: "Tal vez no esté en el próximo Tour, pero lo que sí es cierto es que estaré al tanto".