Arroyo - 0: Alex, Teo, Andrada, Toto, Tomás, Acero (Sergio, min. 58), Juanqui (Massoni, min. 74), Carlos (Pino, min. 65), Corralero, Carlitos, Pablo Valencia.

Sanvicenteño - 0: Isaac, Oscar, Carlos, Fofo, Javito, Angel Morro, Ñete, Alejandro (Juan Alvaro, min. 62), Quini, Alvaro (Tato, min. 82), Diego (Aguinaco, min. 92).

Arbitro: Martín Lemus. Amonestó con cartulina amarilla a los locales Massoni y Corralero; y a los visitantes Quini y Diego.

Incidencias: Partido correspondiente a la decimocuarta jornada del grupo XIV de Tercera División disputado en el estadio Municipal de Arroyo de la Luz ante unos 750 espectadores.

El Arroyo fue incapaz de imponerse al Sanvicenteño (0-0) en un partido insulso en el Municipal donde los locales se han enfrentado a un equipo muy bien hecho y perfectamente asentado en el terreno de juego que no le permitió acercarse con peligro a la portería defendida por Isaac.

Los locales salieron a buscar el encuentro con mucha intención, y ya en el minuto 9, el Arroyo avisó con un remate de Carlos que no encuentra portería, pero deja ver las intenciones del equipo de casa. Transcurría la primera parte sin demasiados sobresalto, y cuando el Arroyo parecía más manso, en el 36, fue Corralero quién le dió un centro a Carlitos que no llegó a definir con claridad, por lo que perdió una magnífica oportunidad. Las ocasiones cada vez eran menos, se enfriaba el partido y transcurrían así, sin más apuro, los primeros cuarenta y cinco minutos

En la segunda mitad fue el Sanvi el que avisó con la ocasión más clara del choque, en un lanzamiento de Diego que Juanqui llegó a salvar en la misma línea de gol. Inmediatamente reaccionó espoleado el Arroyo y Carlitos lo intentó en el minuto 56 con un tiro que no cogió puerta. De nuevo en el 61 remató Andrada, que tampoco encontró puerta, y desde allí en adelante pareció que a los dos equipos le entraron las dudas de no saber si ir a por el partido o salvaguardar el reparto de puntos.

Casi terminada la contienda, en el minuto 92, llegó la ocasión más clara para Corralero, al que le quedó el balón franco e hizo lo más difícil: lanzarlo a las nubes cuando ya se gritaba el gol en el Municipal arroyano.

Al final, fue un partido frío como la tarde y acabó con un reparto justo para ambos equipos que terminaron conformes con el resultado.