El 3-1 del pasado domingo anima a la euforia en la familia del Arroyo, pero el técnico del equipo, Tomás García, prefiere huir del júbilo y opta por la cautela para los 90 minutos que le restan a la eliminatoria contra el Alfaro. "Los jugadores están cada día mejor, se les nota la madurez, aunque creo que mi trabajo ahora será calmarles para afrontar con garantías el próximo partido", aseguró tras el encuentro en el Municipal.

La ilusión es tanta en Arroyo de la Luz --el domingo hubo cerca de mil aficionados en el estadio, cuando la localidad tiene unos 7.000-- que para hoy se ha convocado una reunión a la que están invitados todos los que quieran acompañar a su equipo hasta La Rioja. Será a las 21.00 horas en el Bar La Gasolinera.

Al margen de la euforia, Tomás García ha empezado a preparar a sus jugadores para lo que se encontrarán en Alfaro: un campo mayor que el Municipal de Arroyo de la Luz en el que el equipo local se desenvuelve mejor y en el que ha marcado 61 goles en 19 partidos, lo que supone una media de 3,2 goles por encuentro. El Alfaro, explica García, se desenvuelve bien cuando el equipo que lo visita se encierra atrás, por lo será muy importante salir a por el partido desde el inicio y no cerrar filas en el área de Alex.