El Extremadura Arroyo recibió ayer una dura derrota por 2-3 (25-20, 25-22, 22-25, 16-25, 10-15) en la segunda jornada de la fase de ascenso ante un Club Voleibol Barça que demostró ser uno de los firmes candidatos a lograr una de las dos plazas de ascenso a Superliga.

El conjunto extremeño, tras imponerse en los dos primeros sets, fue incapaz de mantener su nivel de juego y terminó dilapidando su renta en el marcador ante el excelente nivel de juego demostrado en la cancha de Arroyo por la catalanas.

El equipo culé basó todo su poder de reacción en el juego desplegado por su colocadora Mireia Carmona y sus dos jugadoras atacantes por zona cuatro, Casandra Montesino y Claudia Carol, que dieron un recital con remates de todo tipo que la mayoría de las veces no logró defender el equipo extremeño.

NERVIOSISMO El equipo que entrena Adolfo Gómez fue bajando su nivel de juego tras ganar las dos primeras mangas. Entró en una dinámica de nerviosismo que terminó por hacer mella en su sexteto titular hasta el punto de ser irreconocibles en el último juego.

En el primer set, el Extremadura Arroyo marchó siempre por delante liderado por la colocadora brasileña Juliana Storti (25-20). En el segundo, a pesar de que el Barça mostró más solidez en su juego, se repitió el mismo guión del set anterior (25-22).

Sin embargo, en la tercera manga comenzó la reacción catalana con un poder ofensivo basado en las acciones de Montesino y Carol. Se fueron en el marcador 3-9, pero el Arroyo logró empatar a 16 y luego a 19. Pero la falta de acierto de la local Gala Clemente lo notó en demasía su equipo, que cedió por 22-25.

En el cuarto set las extremeñas gozaron de varias ventajas, pero los nervios hicieron que al final se perdiera (16-25). En el quinto y definitivo juego el Barça mantuvo mejor el temple de sus jugadoras ofensivas para cerrar el partido con un definitivo 10-15.